Escalofriante
Para los forenses, Ángeles murió estrangulada en cinco minutos y sufrió un ataque sexual
miércoles 27 de mayo de 2015, 23:46h
Los dos tanatólogos del Cuerpo Médico Forense (CMF) que
hicieron la reautopsia de la joven ratificaron en el juicio que a la
adolescente la asesinaron en no más de cinco minutos, que murió estrangulada y
sofocada y que padeció un ataque sexual.
Se trata de Roberto Cohen y Oscar Lossetti, quienes
confirmaron ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 9 las conclusiones a las
llegó la segunda junta médica integrada por 10 expertos del CMF que el juez de
instrucción Javier Ríos coordinó con un interrogatorio de 72 preguntas para
aclarar las causas y circunstancias de la muerte de Ángeles.
Sin la presencia del imputado Jorge Mangeri (47) en la sala,
Cohen recordó que él participó de la exhumación que se hizo del cadáver a 71
días de la autopsia y que tomó personalmente las "76 muestras de tejidos" que
se enviaron para "235 preparados" de estudios complementarios.
Primero Cohen -quien declaró durante dos horas-, y luego
Lossetti -fue más breve-, contradijeron las conclusiones a las que había
arribado el médico que hizo la autopsia, su compañero en el CMF, Héctor Félix
Konopka, quien ya sostuvo en este juicio que la víctima murió dynamicada en el
circuito de la basura, que tuvo una agonía de 12 horas y que no sufrió un
ataque sexual.
Cohen afirmó que "la causa idónea de muerte fue una asfixia
mecánica mixta por compresión extrínseca manual del cuello y sofocación por
obstrucción manual de orificios nasales y boca".
Ante los jueces Fernando Ramírez, Jorge Gettas y Ana Dieta
de Herrero, el forense afirmó que "la niña tuvo una agonía de no más de cinco
minutos, de corta duración".
Cuando el fiscal Fernando Fiszer le preguntó si detectaron
lesiones compatibles con un abuso sexual, Cohen respondió que si bien "la niña
falleció siendo niña", en su opinión hubo un "ataque sexual sin penetración".
Para justificar esa afirmación, el legista mencionó que
Ángeles presentaba como "lesión genital" una "equimosis" ubicada "en la zona
inguinal izquierda" y que había "lesiones paragenitales" en "la
cara interior del muslo izquierdo y en la cara interior de la rodilla
izquierda".
Para Cohen, ésas son las típicas lesiones que aparecen "en
la maniobra defensiva de impedir la apertura de las piernas".
Sobre el posible ataque sexual, Lossetti -quien también
intervino en la junta médica que se hizo en la causa por la muerte del fiscal
Alberto Nisman-, se limitó a contestar que había lesiones compatibles.
En tal sentido remitió a los jueces la respuesta a la
pregunta número 71 del informe donde la junta contestó: "Hay presencia de
lesiones paragenitales y genitales que impresionan como de etiología contusa,
de naturaleza equimótica y de presunto carácter vital, como las descriptas en
casos de abuso sexual".
Cohen comentó que en los ataques sexuales también aparecen
lesiones "extragenitales" que son "todas aquellas compatibles con signos de
lucha" y que en este caso las halló en los "brazos, antebrazos y el dorso de
las manos" de la víctima.
Si bien admitió que Ángeles probablemente recibió una serie
de golpes en el rostro, Cohen aseguró hoy que, en su opinión, "la niña nunca
perdió la consciencia porque se defendió".
Al ampliar este concepto, el legista dijo que Ángeles "se
defendió con sus miembros inferiores y superiores" y expuso una hipótesis nunca
mencionada en la causa respecto a uno de los cuatro anillos que llevaba en sus
dedos.
Cohen señaló que el anillo metálico plateado "con forma de
mariposa", tenía en la parte de las alas "aristas filosas" que podrían haber
ocasionado en el agresor "excoriaciones lineales similares a las de un
arañazo".
El forense también señaló que quien asesinó a Ángeles le
provocó en vida la fractura de la clavícula derecha y de cinco costillas -otras
diez costillas se fracturaron post mortem en la máquina dynamicadora de
basura-, y dio ante los jueces una posible mecánica del crimen.
Para Cohen, el ataque podría haber comenzado con golpes de
puño sobre el rostro de la víctima que le produjeron "una caída" y que las
fracturas de las costillas se produjeron durante "esa caída" por el sobrepeso
que pudo haber ejercido sobre ella el asesino al caer sobre su cuerpo.
Cohen explicó que el hecho de que las fracturas vitales
detectadas en las costillas sean "escalonadas" -la 9na, 10ma. y 11ra. del lado
derecho y la 3ra. y la 4ta. de la izquierda-, le hace suponer que dicha caída
pudo haber sido sobre una superficie dura y roma como "una cama, un piso con un
realce o una escalera".
Cuando el fiscal Fiszer le preguntó si la caída pudo ser en
una típica escalera de edificio o de un sótano -la fiscalía cree que Mangeri
asesinó a Ángeles en el sótano de Ravignani 2360 o en su casa de la portería
del 8vo. piso a donde se accede por una escalera-, Cohen respondió: "Es
compatible".
Sobre la data de muerte, Cohen explicó que se tomaron "22
parámetros para determinar el intervalo post mortal" y que calcularon que la
muerte de Ángeles se produjo "entre las 10 y las 17" de aquel 10 de junio de
2013.