Los 6 problemas económicos de la Ciudad de Buenos Aires
martes 05 de mayo de 2015, 15:58h
En las recientes PASO que abrieron el proceso de electoral
en la Ciudad,
los candidatos no han hecho foco en la agenda económica de la misma; a lo sumo
han cuestionado el uso de los recursos a ciertos fines, como el publicitario.
Si bien la
Ciudad no puede desligarse de la dinámica general
condicionada por la macroeconomía, no es menos cierto que hay ciertas
cuestiones específicas sobre las que hubiera resultado útil que los candidatos
se manifestaran.
Al menos 6 cuestiones deberían ser puestas en consideración:
1.- La ciudad ha encarado en los últimos años un conjunto de
iniciativas orientadas a perfeccionar la especialización económico-territorial
(los "distritos") sobre las que aún no tenemos resultados debidamente
evaluados. Se han invertido cuantiosos recursos fiscales con la finalidad de
mejorar la competitividad de ciertas cadenas de valor y los informes sobre su
evolución todavía no nos dan una referencia clara de impacto y aprendizaje.
2.- La ciudad carece de un observatorio del empleo de
calidad y por tanto su oferta de formación profesional peca de repetitiva y muy
probablemente desenfocada de las necesidades del mercado.
3.- La infraestructura urbana no solo muestra signos claros
de agotamiento en la vida diaria, sino que parece poco apropiada a una ciudad
que pretende ser un centro global de actividad económica. Por un lado el
desincentivo de las tarifas atrasadas y las regulaciones fuera de lugar, pero
no es menos cierto que la ciudad necesita un "pacto de inversión pública" que
posibilite incrementar la misma de manera sostenible.
4.- Los modos de resolución de la conflictividad sociourbana
(o su ausencia) es un sobrecosto de todas las actividades económicas sobre la
que no hay casi ninguna oferta política. En otras ciudades de América Latina
las instancias de mediación en conflictos colectivos se ha ido desplegando,
como práctica alternativa antiautoritaria. Buenos Aires debe pensar algo al
respecto.
5.- La ciudad se beneficia de su poder de atracción
inmobiliaria, que se ha visto artificialmente estimulado por la política de
tasas de interés bajas y pesificación económica forzada; sin embargo la
inexistencia de una política antiespecultaiva genera impactos también
negativos, dificultando el acceso a la vivienda y quebrando la ciudad
socialmente.
6.- La ciudad es muy poco equitativa fiscalmente; la
tributación de un metro cuadrado de un barrio de alta calidad de vida, es aún
muy bajo comparado con los estándares internacionales y en cambio el fisco
sigue gravando a pequeños emprendedores con impuestos muy mejorables (como
ingresos brutos) o que al menos podrían tener alícuotas mucho menores, bajando
las barreras de acceso a la formalización.
Queda aún la instancia de la elección general, y la
competencia está dada entre candidatos muy buenos que podrán discutir estos
temas, por el bien de la democracia, de la ciudadanía y de la ciudad.