Lo informó Timerman
Argentina envió notas a Estados Unidos y a Griesa en rechazo al pedido para que se declare al país en desacato
lunes 29 de septiembre de 2014, 16:25h
El canciller Héctor Timerman informó fueron presentadas
sendas notas al gobierno de los Estados Unidos y al juez. "Este dislate
debió ser rechazado de inmediato y sin necesidad de sustanciarlo", dijo.
Los abogados de la Argentina plantearán hoy ante Griesa que la solicitud de
desacato es "jurídicamente inadmisible".
En tanto, Timerman aseguró que los diferentes tratados de la
ONU y la OEA a los que adhieren tanto Argentina como los Estados Unidos
reconocen "la igualdad soberana entre Estados" y advirtió que un potencial
dictamen que declare a nuestro país en desacato por el tema de los fondos
buitre "no sólo viola de forma manifiesta el derecho internacional sino que es
un antecedente que podría ser utilizado en el futuro" contra el país
norteamericano.
Durante la conferencia de prensa realizada en la Casa de
Gobierno, el ministro advirtió que según las convenciones internacionales "en
ningún caso" puede darse curso a "las medidas de apremio solicitadas por los
buitres, sostener lo contrario atentaría contra las formas más básicas de convivencia
internacional".
En Nueva York, desde las 16 (las 17 en la Argentina), habrá
una audiencia en la que el juez Thomas Griesa definirá si emite una sanción
contra Argentina por desacato, según le pidieron los fondos buitre en el
litigio que impulsan.
Timerman informó que Argentina presentó sendas notas al
gobierno de los Estados Unidos y al juez Thomas Griesa, en rechazo al pedido de
los fondos buitres para que se declare al país en desacato por no cumplir con
la sentencia del magistrado norteamericano que obliga al pago de 1.330 millones
de dólares.
"Este dislate debió ser rechazado de inmediato y sin
necesidad de sustanciarlo", dijo Timerman en una declaración a la prensa
en Casa de Gobierno en la que indicó que "esa pretensión (de los fondos
buitre) implica un desconocimiento o una percepción alterada de las normas del
derecho internacional vigente".
En la presentación ante el Juzgado de Griesa, titulada
"Memorándum de la República Argentina en oposición a
la solicitud de las demandantes de declarar a la Argentina en desacato civil e
imponer sanciones", Argentina afirma que "la solicitud de las
demandantes es legalmente inadmisible, inaplicable y de imposible
cumplimiento" y que "debe rechazarse".
En el texto, se argumenta que "el desacato civil es una
herramienta diseñada para forzar a una parte a "depurar" la conducta violatoria
de una orden emanada de un tribunal; no es y no puede ser- como las demandantes
pretenden aplicarlo aquí- un castigo por una conducta pasada".
"La orden propuesta no resolverá el estancamiento
actual que enfrentan tanto las partes como el Tribunal como consecuencia de las
medidas cautelares pari passu (que son de imposible cumplimiento) sino que más
bien agravará la situación. Sin dudas será utilizado por las demandantes solamente
para elevar aún más su retórica negativa de ataques públicos hacia la
República. Este no es un uso adecuado de la facultad que tiene el Tribunal para
declarar el desacato", asegura.
La nota de 17 páginas que lleva la firma del estudio Cleary
Gottlieb Steen & Hamilton LLP, indica además que "el derecho y la
práctica internacionales no contemplan dictar órdenes contra Estados
Extranjeros" y que la Foreign Sovereign Immunities Act (FSIA)
"prohíbe la declaración de sanciones de desacato contra Estados Extranjeros".
En tanto, en la nota al secretario de Estado John Kerry, la
embajadora argentina en los Estados Unidos, Cecilia Nahón, recordó cómo llevó
adelante la Argentina la reestructuración de la deuda y enumeró las decisiones
tomadas hasta el momento por la justicia estadounidense que son
"contrarias al apoyo que ha brindado la comunidad internacional a la
posición argentina y el mismo Poder Ejecutivo de los Estados Unidos a través de
las presentaciones como Amicus Curiae ante sus propios tribunales".
"En el marco del acoso judicial desmedido del que mi
país es víctima a través de una orden judicial de cumplimiento imposible, ahora
se suma un nuevo y mayor disparate jurídico por parte de los demandantes,
quienes el 24 de septiembre pasado solicitaron que se declare en desacato a la
República Argentina y se apliquen sanciones en virtud del alegado
incumplimiento de las órdenes judiciales", indicó Nahón.
Al respecto, remarcó que "Argentina advierte que es
total y absolutamente inconcebible que los litigantes hayan considerado que un
juez local pueda declarar a un Estado extranjero 'en desacato'", que iría
en contra de los "principios sobre los que descansa la convivencia
internacional" que se encuentran en la Carta de las Naciones Unidas.
"Una declaración de desacato implicaría una escalada
sin precedentes y aún muy superior, inclusive, a la decisión de retener o
impedir el cobro de los bonistas reestructurados. No se trata solamente de la
afectación de derechos de terceras personas, sino de vulnerar aún más la
soberanía de la República Argentina", continuó.
Por último, remarca que: "Cualquier decisión que
adopten los tribunales de los Estados Unidos de América que pueda frustrar
dicha reestructuración de deuda soberana o cuestionar la actuación de los
órganos políticos de la República Argentina, no sólo estaría fuera del alcance
de su jurisdicción, sino que constituiría además una ilegítima injerencia en los
asuntos internos del Estados argentino, que comprometería la responsabilidad
internacional de los Estados Unidos de América", concluye.