Argentina y UNASUR impulsan una reforma igualitaria de la OEA
domingo 08 de diciembre de 2013, 01:33h
La Argentina
integra el grupo de países que proponen reformar la OEA,
organismo que surgió de la posguerra mundial, para ponerla a tono con
los desafíos que plantea la agenda del siglo XXI en América.
La modernización es
necesaria para encarar más eficazmente los programas que aborden los grandes
temas sobre los que hay consenso en buena parte de los Estados miembros y que
se basan en los 4 pilares de la organización: DEMOCRACIA, DDHH, SEGURIDAD Y
DESARROLLO INTEGRAL.
Los primeros pasos en este sentido ya fueron dados. La
Argentina tiene una clara posición al respecto. La presidenta Cristina
Fernández de Kirchner nos encomendó la tarea de construir consensos para
reforzar la alianza subregional sudamericana también en este cuerpo que además
integra la principal potencia económica y militar del mundo, Estados Unidos.
La OEA tiene hoy problemas presupuestarios para hacer frente
a las actividades que se desarrollan en el área de cada uno de sus pilares. La
situación requiere revisar los mandatos dados a la organización y determinar
las prioridades irrenunciables, racionalizar el funcionamiento e impulsar el
uso de modernas tecnologías, como la video conferencia, para disminuir los
costos de muchas de sus reuniones. También es imperativo aumentar su presupuesto
regular a través del aumento de las cuotas de los Estados miembros, calculadas
de forma proporcional a la población de cada uno.
Además, la adopción de este criterio daría solución a la
situación actual en el que un solo país, EEUU, aporta casi un 60% del
presupuesto. Por otra parte, también evitaría que el organismo tuviera una
dependencia significativa de las donaciones de los Estados Observadores, que
hoy duplican en número a los Estados miembros. Creemos que básicamente es
responsabilidad de estos hacerse cargo de la viabilidad presupuestaria del
organismo para cumplir sus objetivos. Esto sin perjuicio de buscar mecanismos
de cooperación con otras entidades multilaterales, como la CEPAL o el BID, que
permitan compartir el esfuerzo financiero de ciertos programas.
El proyecto de reformas del Estatuto de la OEA deberá estar
listo para mediados de este mes de diciembre a los efectos de que las
representaciones de los Estados miembros estén
en condiciones de remitirlo a sus respectivas cancillerías en consulta.
En febrero, con las respuestas, el Consejo Permanente, integrado por los
Embajadores de los Estados miembros, compatibilizará la redacción que debe ser
aprobada en la Reunión de Cancilleres que se celebrará en la ciudad de Asunción
en la República de Paraguay, entre el 4 y el 6 de junio del próximo año.