Muchos celíacos encuentran dificultades a la hora de salir a cenar o a tomar algo, porque la mayoría de los bares y restaurantes no sirven platos especiales para ellos. Un local madrileño ofrece un menú que les hace sentir tan seguros como en su propia casa.
“He venido porque mi novia es celíaca y nos han hablado de este sitio. Me gustaría que me enseñarais la carta para decirle qué platos especiales teneis para ella”, pregunta Juan, un joven de 23 años desde el umbral del No Solo Pasta.
Como Juan, son muchos los que se acercan a este restaurante situado en la Avenida de Viñuelas tricantina, bien porque son celíacos o bien porque algún familiar o amigo lo es. La celiaquía es una intolerancia permanente al gluten, un grupo de proteínas existentes en alimentos tan comunes como el trigo, la cebada, la avena o el centeno. Suele aparecer entre los 2 y 3 años aunque, a veces, se presenta de repente condenando al que la sufre a una estricta dieta sin gluten para el resto de su vida.
“Ni mi marido ni yo somos celíacos”, afirma Susana, propietaria del restaurante, “pero el hijo de unos amigos sí lo es y hemos sufrido con él, en múltiples ocasiones, el no poder salir a un sitio o a otro por no encontrar un lugar donde pudiera comer tranquilo. No es solo evitar los alimentos con gluten, sino también los que vienen ya elaborados y envasados pues ,en muchas ocasiones, se desconoce su contenido en gluten. Decidimos crear No Solo Pasta para que los enfermos de celiaquía puedan comer sin temor”, añade.
No Solo Pasta nació en 2003 y actualmente tiene dos locales en nuestra comunidad, el de Tres Cantos y otro en el centro de Madrid, en la calle de Santiago número tres. “En el restaurante de Tres Cantos tenemos cocinas independientes. Decidimos separarlas por el tema de la contaminación cruzada. Un cocinero puede usar o manipular harina sin gluten, pero la puede contaminar con cualquier utensilio de cocina que haya utilizado antes para preparar otro plato. Somos conscientes de que hay que tener un cuidado extremo a la hora de manipular los alimentos y por eso somos los únicos que tenemos las cocinas separadas”, declara Víctor, marido de Susana y también propietario de No Solo Pasta.
A día de hoy, en nuestra comunidad, solo hay 22 locales (17 restaurantes y 5 bares de tapas y bocaditos), cuatro Vips y dos Telepizzas que preparan comidas especiales para celíacos. Pero desgraciadamente, en la mayoría de ellos, sirven muy pocos platos para los enfermos de celiaquía. “Estamos encantados con No Solo Pasta. La pasta la elaboran ellos mismos, incluso los rellenos, y a pesar de no tener gluten, sus platos resultan de los más frescos y sabrosos. Y todo por un precio de lo más razonable. Esperamos que cada vez sean más lo que decidan trabajar con la calidad con la que lo hacen los dueños de este restaurante”, declara Manuela Márquez, directora de la Asociación de Celíacos de Madrid (ACM).
No Solo Pasta ha firmado un acuerdo con la ACM por el que les ceden el 0,7 por ciento de su facturación: es algo parecido a una aportación solidaria. “Queremos que la gente sepa que no solo hacemos comida para los celíacos. Ellos vienen y lo hacen siempre acompañados. A la gente que por suerte no sufre esta enfermedad, le ofrecemos también una amplia variedad de platos y todos elaborados con productos naturales y con el mismo cuidado que para los celíacos. Solo usamos los moldes y lo demás lo hacemos con nuestras manos”, explica Susana.
Ramón, un joven cliente celíaco de 20 años, lo corrobora. “Yo llevo viniendo aquí un montón de tiempo, desde que lo abrieron, y lo hago porque sé que aquí puedo bajar la guardia con lo de mi enfermedad. A mí lo que más me gusta, además, claro está, de la pasta, son las pizzas y el pan, que también lo hacen ellos. Al final a mis amigos les gusta más el pan de No Solo Pasta, que no tiene gluten, que el pan normal”, sonríe.
Si (
No(
