¿Quién dio el chivatazo dentro del PP sobre el 'caso Bárcenas'?

El PP se ha convertido estos días en un avispero. Desde que se publicara en la prensa que el ex tesorero del partido, Luis Bárcenas, no sólo habría reunido hasta 22 millones de euros en cuentas en Suiza con origen desconocido, sino que también repartía sobresueldos a los dirigentes del PP con dinero negro, la tensión es máxima. El caso es que la gran duda que ahora todos se plantean es... ¿quién dio el chivatazo a la prensa?

Una vez publicado este escándalo en el diario 'El Mundo', la pregunta se retrasó, porque la noticia era suficientemente impactante como para retrasar esta duda. Pero pronto la atención se dirigió hacia este punto: ¿quién dio el chivatazo dentro del PP sobre el 'caso Bárcenas? ¿Quién se beneficiaba de que se conociera esta realidad tan negativa para el partido? 

Los primeros pensamientos apuntaron a Esperanza Aguirre, ex aspirante a dirigir el partido. Las especulaciones versaban sobre que Aguirre, ahora retirada de la primera línea política, quería terminar de fraguar su venganza hacia el sector de Mariano Rajoy, comandado por Cospedal y Soraya Sáenz, entre otros dirigentes, más liberales y alejados del sector conservador.

Pero los únicos argumentos en contra de Aguirre iban por este lado. ¿Qué gana realmente Aguirre siendo la autora de estas filtraciones a la prensa? ¿Se vengaba así por las filtraciones sobre algunos comportamientos sospechosos en la Comunidad de Madrid, como el caso del ático de Ignacio González, su sucesor? ¿Sacudía a Rajoy así de su momento plácido como presidente?

Lo dicho: rumores y especulaciones, pero ninguna certeza. De hecho, Aguirre sería una de las dirigentes del PP más molestas con Bárcenas y acusó al partido de no haber actuado antes. 

Y, por contra, está la otra tesis: que el propio aparato de Génova 13 forzó esta situación para finalmente quitarse de en medio a la vieja guardia dentro de un plan de renovación interna, limpiando así asuntos viejos que preocupan a Rajoy, como el de los pagos en dinero negro. Según esta teoría, la propia Dolores de Cospedal fue la 'chivata', aunque tampoco encaja. Desde que estalló la crisis, la única perjudicada ha sido ella, casi totalizando las miradas y las protestas por cómo ha gestionado en estos últimos años el PP.

Ella, como secretaria general, tiene el deber de dejar las cosas hechas a Mariano Rajoy, quien desde 2008 estaba centrado en la única meta de la presidencia del Gobierno. Se supone también que así Cospedal se llevaría los 'palos' pero limpiaba del todo a viejos cargos y dirigentes que no podría retirar de Génova 13 sin tener una justificación como ésta. El nombre de Rajoy, en todo caso, no quedaría mal, ya que el 'escándalo Bárcenas' viene de la época anterior a él, cuando quien era secretario general del partido era Francisco Álvarez-Cascos, haciéndole de capitán a Aznar. Cascos, como es sabido, y toda su gente de entonces, son actuales 'gente non grata' en Génova. Rajoy quiere sólo a su equipo, y habría encontrado una manera de quitarse de encima a la generación de Aznar, Aguirre y demás herencias del pasado.