Acusado de autor intelectual del hecho
Imputan por primera vez al alcalde por la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa
miércoles 14 de enero de 2015, 09:49h
José Luis Abarca fue acusado como autor intelectual del
hecho, en tanto los padres de las víctimas reiteraron su exigencia al gobierno
federal para que se abra una línea de investigación a fin de determinarse si
hubo responsabilidad del Ejército.
El director de la Agencia de Investigación Criminal, Tomás
Zerón, difundió los nuevos cargos contra Abarca, que fue detenido en noviembre
y está recluido en un penal de alta seguridad, pero por otros delitos.
Hasta ahora, el ex alcalde estaba acusado de delincuencia
organizada, secuestro y homicidio calificado, por el asesinato del líder social
Arturo Hernández Cardona, ocurrido en 2013.
Según las autoridades, Abarca y su esposa, María de los
Ángeles Pineda, también detenida, fueron los autores intelectuales del ataque
perpetrado contra los estudiantes, que dejó seis muertos, 25 heridos y 43
desaparecidos, en una tragedia de repercusión mundial registrada el 26 de septiembre
pasado y que mantiene golpeada la gestión del presidente Enrique Peña Nieto.
El caso Ayotzinapa destapó otras muertes y desapariciones
ocurridas en los últimos años en la zona de Iguala, 200 kilómetros al sur de la
capital. Como parte de las investigaciones se han hallado los cadáveres de
otras 30 personas, de las cuales por ahora sólo 12 han sido identificadas.
Cinco policías municipales enfrentan órdenes de aprehensión por estas muertes.
Zerón informó que hasta hoy suman 97 detenidos por el caso y
descartó que haya habido participación del Ejército, como afirman familiares de
los desaparecidos, que ayer intentaron ingresar a un cuartel militar en Iguala
para ver si los estudiantes estaban dentro.
Según indicó Zerón, de las investigaciones "no se desprende
participación alguna de cuerpos de seguridad federales en desaparición de
estudiantes".
Sin embargo, los padres de los 43 estudiantes, al reanudar
el diálogo con el Gobierno Federal, reiteraron su exigencia para que se abra
una línea de investigación sobre el papel del Ejército en los hechos.
Los jóvenes, alumnos de la Escuela Normal Rural de formación
de maestros de Ayotzinapa del sureño estado de Guerrero, fueron perseguidos y
detenidos por policías municipales de Iguala para impedir que sabotearan un
acto de la esposa del alcalde.
Después fueron entregados al grupo criminal Guerreros Unidos,
que los asesinó e incineró en una fogata encendida en un basurero, de acuerdo
con la versión de tres autores materiales.
Sólo se identificaron hasta ahora los restos de uno de los
jóvenes.
El vocero del grupo de padres, Felipe de la Cruz, aseguró
que "hay por lo menos 10 estudiantes que han declarado que el Ejército
participó el día de los hechos", así como "varios policías y personas
de Guerreros Unidos".
Como próximas acciones, De la Cruz anunció que seguirán las
movilizaciones, tanto en lugares públicos como cerca de instalaciones
policíacas o militares "si es necesario".
Asimismo, continuará con la búsqueda ciudadana, ya que
consideran que desde que el contingente de la Gendarmería de la Policía Federal
llegó a Iguala, los resultados han sido "nulos".