Camila Speziale y Hernán Pérez
Los activistas argentinos de Greenpeace quedaron detenidos en Rusia por piratería
martes 24 de septiembre de 2013, 23:51h
Los 30 activistas detenidos por el intento de escalar una
plataforma petrolera en el Artico, entre ellos los argentinos Camila Speziale y
Hernán Pérez, estaban en dependencias federales en Murmansk y Rusia los
investiga por "piratería" pero aún no los acusó, dijo Greenpeace.
El rompehielos está anclado en una bahía cerca de esa ciudad
y los activistas "fueron trasladados en dos micros hacia el edificio del
Comité de Investigación de la Federación Rusa (Murmansk Investigative
Authority), donde serán interrogados en las próximas horas", detalló la
organización ambientalista.
La ONG y la embajada argentina en Moscú informaron hoy que
los activistas fueron puestos a disposición de la justicia rusa, tras arribar a
esa ciudad a bordo del barco "Arctic Sunrise", que fue remolcado
desde el Mar de Pechora, a donde llegaron para protestar contra la explotación
petrolera en la plataforma de Gazprom.
"De la detención de Speziale y Pérez Orsi se está
ocupando personalmente en Murmansk el jefe de la Sección Consular de la
embajada, Jorge Nicolás Zobénica", dijo a Télam una fuente de la sede
diplomática.
"También está tratando la situación de los argentinos,
acá en la capital rusa, el embajador Juan Carlos Kreckler", agregó.
Una delegación diplomática compuesta por 18 personas de 9
nacionalidades -incluido Zobénica- subió al Artict Sunrise dos horas después de
su arribo a Murmansk y mantuvo reuniones con los ecologistas de sus respectivos
países.
"Greenpeace mantuvo contacto limitado con los tripulantes.
Todos gozan de buena salud y buen ánimo. Algunos de ellos incluso han sido
capaces de hacer llamadas a sus amigos y familiares", indicó la
organización.
Los abogados de Greenpeace estaban en el lugar donde
alojaron a los activistas "pero aún no les han concedido el acceso a
representarlos. Los diplomáticos también se encuentran en el edificio, junto a
los medios de comunicación y hay alta presencia policial" y "una
quincena de investigadores y traductores", detallaron.
El Servicio Federal de Seguridad Ruso (FSB) emitió hoy
"una declaración en la que afirman que han abierto una investigación
criminal acusando a los activistas de piratería".
"Esto significa que aún no existen acusaciones formales
por lo que, al momento, se desconoce lo que ocurrirá en términos legales",
señaló Greenpeace en un comunicado.
Según el art. 227 del Código Penal ruso, indicaron,
"para que se pueda acusar de piratería a quien realice un ataque a un
barco, esta persona debió cometer el hecho con el propósito de robo de bienes o
mercadería que se encuentren a bordo", y que se haya usado violencia o que
amenazado con emplearla.
"Nuestra acción fue en una plataforma de petrolero,
Greenpeace nunca abordó un barco, ni tuvo el propósito de robo, mucho menos
existió violencia. Tenemos más de 40 años de historia de acciones
pacíficas", sostuvo Martín Prieto, director ejecutivo de Greenpeace.
Speziale, de 21 años y que vive en el barrio
porteño de Caballito, es voluntaria de la organización en Argentina desde hace
4 años y cumplía su primera misión en el exterior. En tanto, Hernán Pérez Orsi
es miembro pleno de Greenpeace internacional