Cobrando su pensión
El padrastro de Ángeles estaba en un banco a la hora del crimen
martes 16 de julio de 2013, 23:45h
Sergio Opatowski estaba cobrando su pensión por viudez en el
horario en el que la víctima fue interceptada por quien la asesinó, según un
informe y un video que aportó a la causa la entidad bancaria
Fuentes de la investigación explicaron a Télam que la
presencia en el banco lo aleja a Opatowski unas 55 cuadras de la escena del
crimen y confirma lo que hizo durante el horario en el
que fue cometido.
Voceros de la investigación revelaron que el Banco Macro le
envió al juez de la causa, Javier Ríos, las constancias de que a las 10 de aquel lunes 10 de junio, Opatowski entró a
la sucursal de Sarmiento y Reconquista, y acompañó los videos de las cámaras de
seguridad.
A las 10.07, -es decir 17 minutos después de que a Angeles
se la ve en un video llegar al edificio de Ravignani 2360-, el hombre cobró por
ventanilla su pensión por viudez.
Si bien nunca declaró en la causa, públicamente Opatowski
siempre dijo que aquella mañana desayunó en su casa, se retiró a realizar
trámites como el de su pensión en el Banco Macro y cobranzas para la empresa de
desinfección en la que trabaja su mujer, María Elena Aduriz, y que recién
regresó alrededor de las 14 a Ravignani 2360.
La propia Aduriz también había contado, al declarar como
testigo, que su marido Opatowski había ido esa mañana a cobrar la pensión que
ella calculó era de alrededor de 4.200 pesos.
El informe del banco beneficia la situación de Opatowski,
quien aún no fue llamado a declarar por la Justicia y fue investigado como
sospechoso al inicio de la investigación, antes de que sea detenido el portero
Jorge Mangeri.
El chequeo de esta coartada fue una de las 52 medidas que
ordenó ayer el juez y a menos de 24 horas de que la División Homicidios de la
Policía Federal se contactó con la presidencia del Banco Macro, el informe
estaba en sus manos.
En tanto, Juan Cruz Rawson, hermano de la víctima, amplió
hoy su declaración testimonial ante el juez y afirmó que tenía un buen concepto
de Mangeri, pese a ser el único imputado por el crimen.
Otro testimonio, fue el de la mujer que había advertido por
correo electrónico a la fiscal Paula Asaro que debían investigar a Mangeri y
reiteró que su empleada doméstica, a la que identificó, le había dicho que las
mujeres del barrio le temían al portero.
Por su parte, el abogado Pablo Lanusse, quien representa en
la causa a Franklin Rawson, el padre de Angeles, destacó hoy como prueba
contundente que en el cuerpo de la chica se haya encontrado el ADN del
encargado del edificio en el que vivía.
"Hay sólo dos personas que saben lo que ocurrió:
Angeles y el señor Mangeri. Angeles Rawson habló en su autopsia, a través del
ADN que se extrajo de sus uñas, y dijo de quién se defendió, quién fue el
agresor. La otra persona, hasta el día de hoy, ha preferido mantener el
silencio", reflexionó.
Respecto a la evidencia genética, el abogado Marcelo Biondi,
defensor de Mangeri dijo a Télam que hoy presentaron ante el juez Ríos un
pedido para que se la declare nula, debido a que "nadie custodió las
muestras".
"En el expediente no consta ningún instrumento que
sustente el trayecto de las muestras tomadas del cuerpo de la víctima y de
Mangeri al Cuerpo Médico Forense (de la Corte Suprema de Justicia)y de ahí a
los laboratorios donde se analizaron", cuestionó.
Para el defensor también hay "errores en la
autopsia" y en ese sentido cree que la víctima "no murió
dynamicada" en el contenedor de basura, por lo que aguarda los estudios
complementarios de los forenses para determinar esa y otras cuestiones sobre la
forma en que se cometió el homicidio.
Por otra parte, el magistrado ordenó una pericia
psiquiátrica al imputado Mangeri orientada a detectar algún tipo de trastorno
sexual que pueda padecer y que se haya convertido en el disparador del móvil
del crimen de Angeles.