¿Quién lo entiende?
Ahora Mujica defiende la relación con Argentina "a muerte"
viernes 28 de junio de 2013, 17:30h
El presidente uruguayo aseguró que defiende "a muerte la
relación de Uruguay con Argentina" y resaltó la necesidad de "fortalecer" el
Mercosur, "pero teniendo en cuenta que un proceso de integración es mucho más
que relaciones comerciales".
Mujica recibió a Télam en su casa de las afueras de
Montevideo y destacó la "importancia" que tiene hoy la relación bilateral entre
Uruguay y Argentina, al que calificó como "un gran país, formidable".
"He pagado mucho costo interno por ponerme al hombro la
mochila de las relaciones bilaterales. Pero yo defiendo a muerte la relación
con Argentina. Voy a batallar y pagaré el precio que sea", reconoció.
El mandatario, de 78 años y en la presidencia de Uruguay
desde el 1 de marzo de 2010, planteó además una serie de luces y sombras que ha
atravesado hasta ahora la integración regional, y propuso como central que los
países de la región profundicen esos vínculos porque "si fracasamos
estaremos vencidos, pulverizados", advirtió.
"No es mucho lo que se ha hecho", juzgó Mujica sobre la
Presidencia pro témpore del Mercosur que Uruguay le entregará el 12 de julio a
Venezuela en la próxima Cumbre de Presidentes del bloque, en Montevideo; y en
esa línea, destacó que lo avanzado "es más por las relaciones bilaterales entre
las presidencias que por la mecánica del bloque".
Dentro de los avances logrados en esta etapa, Mujica destacó
que los países miembro del bloque regional hayan acordado una claúsula "para el
reingreso automático de Paraguay cuando se produzca su cambio de autoridades",
lo que ocurrirá cuando el presidente electo, Horacio Cartes, asuma el próximo
15 de agosto, tras la suspensión con que el bloque sancionó a Paraguay en 2012
por la destitución de Fernando Lugo.
También apuntó avances en la integración con Brasil y "los
acuerdos" logrados para la navegabilidad del Río Uruguay junto a la Argentina,
pero Mujica consideró que "uno de los grandes desafíos" para la integración
será cómo pararse frente a China.
"La competitividad exportadora de China es irresistible para
nuestro bloque. A los elefantes no se los puede detener", expresó el
mandatario, y por eso convocó a sus pares del Mercosur a "pensar
estratégicamente qué hacemos con China", al que Uruguay le vende cerca del 20%
de sus exportaciones y que en un futuro cercano se convertirán en el 30%,
pronosticó Mujica.
"Creo que hay espacio para negociar fuerte con los chinos,
pero una cosa es si vamos como Mercosur y otra si vamos todos separados, por la
nuestra", estimó el mandatario, que a fines de mayo realizó una gira de cinco
días por el gigante asiático.
Además, Mujica consideró que en ese escenario "es muy
importante" el planteo hecho por Bolivia y Ecuador para sumarse como socios
plenos al bloque, y aventuró que "luego vendrán muchos más".
El mandatario planteó sin embargo que "un proceso de
integración es mucho más que relaciones comerciales", y consideró que debería
concebirse al bloque como "una gran cadena de producción, en la que una fábrica
se instale aquí para hacer un producto, luego otro en un vecino y desde ese
país exportar a un mercado que hoy ya somos más de 200 millones de posibles
consumidores", resaltó.
"Los procesos de integración tienen que servirle a la
gente", lanzó.
En esa dirección, llamó a los demás miembros a "mirar el
enorme mercado interno potencial que tenemos" y estimó que "si bien hubo
avances notables, aún tenemos 200 millones de pobres en América Latina".
"El punto de arranque que tuvimos fue que es el continente
más injusto que hay arriba de la tierra. Ha sido muy inequitativo, y hay una
deuda social muy fuerte todavía. Que hayamos avanzado muchos no quiere decir
que lo hayamos resuelto. El problema existe. Y si viene una crisis no sabemos
si no hay sectores que han quedado en el límite, que no vuelven a caer en la
pobreza", afirmó.
En este punto, el mandatario señaló que el interés de
acercarse a la Alianza del Pacífico es acotada, y que Uruguay "no será más
que miembro observador" del bloque comercial que integran Chile, Perú,
Colombia y México, dijo.
"No podemos violentar el Mercosur", definió el
mandatario, ratificando la postura oficial de su país luego de que el
vicepresidente de Uruguay, Danilo Astori, planteara su preferencia por sumarse
de manera plena a ese bloque, algo luego desmentido por el canciller Luis
Almagro.
"Nosotros consideramos que los proyectos de integración
que están vigentes en América del Sur son provisorios. Son apenas etapas
intermedias de algún tipo de unidad mayor que hay que pugnar por
construir", analizó Mujica en la entrevista con Télam.
"Por eso Uruguay decidió ser observador en el ALBA y en
la Alianza del Pacífico, pero sabiendo bien que su pertenencia está en el
Mercosur. Queremos ayudar a que los otros bloques se vayan acercando. Tenemos
que juntarnos entre nosotros lo más posible", justificó.