Choque ferroviario en Castelar
La Justicia imputó a uno de los maquinistas sin prisión preventiva
domingo 16 de junio de 2013, 23:53h
Se trata de Daniel López, quien conducía la formación que el
pasado jueves embistió a otro tren en Castelar. El juez federal de Morón, Jorge
Rodríguez, dictó además la falta de mérito del otro conductor.
La letrada de ambos y del sindicato, Valeria Corbacho,
confirmó la excarcelación de López y contó que anoche ya había sido liberado
por falta de mérito Raúl Ahumada, el conductor de la formación 3725 chapa 19
que estaba estacionado el pasado jueves en las proximidades de la estación
Castelar de la línea Sarmiento, cuando fue chocado desde atrás por el tren que
conducía López, el chapa 1, ocasionando la muerte de tres personas y lesiones a
otras 300.
Ambos maquinistas prestaron declaración ante el juez
federal de Morón, Jorge Rodríguez, y el fiscal Sebastián Basso, quienes
investigan los hechos y tomaron las medidas que se conocieron en las últimas
horas.
En este sentido, el juez decidió que López quede imputado
pero sin prisión preventiva, por tratarse de una persona sin antecedentes
penales, y porque el magistrado considera que no hay peligro de fuga ni que va
a entorpecer el desarrollo de la causa que se tramita en el Juzgado federal 2
de Morón.
Corbacho afirmó que López es una persona muy precavida, con
31 años de servicio, y que en su declaración advirtió que los frenos "no
le respondieron", aunque "no recuerda si normalizó o no el botón de
emergencia".
Por su parte, el secretario de prensa del sindicato de
maquinistas "La Fraternidad", Horacio Caminos, volvió a respaldar la
versión de López, según la cual se trató de un accidente provocado por una
falla en el sistema de frenos, aunque admitió que "no podemos hacer una
defensa corporativa" del conductor hasta que se realicen las
correspondientes pericias.
"Pero ante un compañero que tiene más de 25 años de
experiencia en este trabajo, con una foja de servicios impecable; y un equipo
primero saqueado y luego reconstruido por el Grupo Plaza, nosotros vamos a
defender a nuestro compañero. Nuestro compañero no miente", dijo.
Para el gobierno "No hay evidencias físicas, ni mecánicas de que se
hayan accionado los frenos"
El titular de la Comisión Nacional de Regulación del
Transporte, Ariel Franetovich, afirmó que los frenos del tren de la línea
Sarmiento que el jueves último embistió a otro en cercanías de la estación
Castelar "funcionaban", porque eran "nuevos".
El titular del organismo de contralor del transporte lo
expresó al salir del juzgado Federal de Morón, donde concurrió esta tarde para
presentar pruebas sobre el normal funcionamiento de los frenos del tren
accidentando, ante el magistrado que investiga el siniestro que costó la vida a
tres pasajeros.
Franetovich entró a los tribunales de Morón, acompañado de un grupo de técnicos de la CNRT que traían carpetas con
documentación sobre la formación accidentada y la infraestructura ferroviaria.
Después de más de dos horas de audiencia, el funcionario
dialogó con los medios presentes y señaló que "no hay ninguna evidencia
física ni mecánica de que el conductor haya intentado frenar la
formación", ya que "la palanca de velocidad quedó en el máximo y el
panel del freno no fue activado".
"La formación accidentada había pasado una revisión
general y hoy presentamos ante la justicia los testimonios de distintos
maquinistas que probaron esa formación durante la semana pasada antes de que
entrara en servicio", informó.
Los técnicos de la CNRT que acompañaban a Franetovich
exhibieron a la prensa fotografías del interior de la cabina del tren donde se
comprueba la disposición de los controles y el correcto funcionamiento de los
frenos de la formación.
Además mostraron imágenes de la caja negra del tren, que
registró una velocidad de 61 kilómetros por hora al momento del impacto, en
coincidencia con el monitoreo por GPS que difundió el mismo jueves el ministro
del Interior y Transporte, Florencio Randazzo.
En referencia al sistema de señales, Franetovich aclaró:
"las señales funcionan bien, por eso el tren embestido estaba detenido,
porque las había visto. La primera estaba en naranja, que significa precaución;
la segunda estaba apagada, por lo que el conductor debía frenar; y las últimas
dos estaban en rojo advirtiendo el peligro inminente y que era obligatorio
frenar".
"Queremos respetar todas las hipótesis, pero esta es
una situación diferente a la da la tragedia de once, las vías son nuevas y el
material rodante fue totalmente renovado, no creemos que haya habido una falla
del material", concluyó Franetovich.