A las prepagas solo les interesa el negocio
domingo 29 de septiembre de 2013, 22:40h
Que a
las empresas de medicina prepaga les interese ganar plata es aceptable y
entendible,. Pero cuando estas demuestran tener nula sensibilidad con
determinada población que necesita de tratamientos especiales, solamente
pensando en su propia economía las deja al descubierto y muy mal paradas ante
la sociedad.
Para
colmo nada hacen para esconder estas mezquindades, sino que las empresas de
medicina prepaga manifestaron a viva voz su rechazo a las leyes de salud aprobadas por
el Congreso Nacional desde 2007 hasta la fecha, a las que calificaron como una
"aberración científica".
Fue
durante el último Congreso Anual de la Asociación Civil de AsociacioneS Médicas
Integradas (ACAMI), realizado hace dos semanas en la ciudad de Bariloche, en la
que participaron alrededor de 200
ejecutivos de empresas de medicina prepaga de todo el país.
Se
trata de las leyes de medicación por hepatitis crónica, de ligadura de trompas,
de tratamiento hormonal de emergencia, de drogadependencia, de conductas
alimentarias, de obesidad mórbida, de celiaquía, de asistente domiciliaria, de
discapacidad, de alcoholismo, y de fertlización asistida.
Los
ejecutivos hablaron de "una fiesta" de leyes entre 2007 y la
actualidad, dentro de las cuales la recientemente sancionada de fertilización
asisitida fue calificada como "la frutilla del postre".
Allí,
se expresaron rechazos a distintas políticas públicas en materia de salud,
desde las leyes sancionadas "espasmódicamente" por el Congreso en los
últimos seis años, hasta la regulación que el Estado hace de la actividad,
pasando por críticas a la Justicia y a las asociaciones de defensa de los
consumidores.
También
hubo declaraciones discriminatorias contra celíacos y parejas de homosexuales.
El
director del Plan de Salud del Hospital Italiano de Buenos Aires, Marcelo
Marchetti, habló de las "exageraciones de las regulaciones", y
sostuvo que "el Programa Médico Obligatorio (PMO) en Argentina se parece a
todo lo que aparezca y, ante la duda, los jueces dicen: `todo lo que
hay`".
"Ni
hablar de la ley de regulación de la medicina prepaga que es para el 10 por
ciento más rico", sostuvo el ejecutivo, quien remarcó que "la ley
tiene un aspecto que nos preocupa mucho que es el ingreso normado o poco
normado de gente con patología previa".
Marchetti
puntualizó que "el ingreso termina siendo por una resolución: `ingréselo y
después le vamos a decir qué cuota se puede tomar`, o bien por un llamado
telefónico o por un juez diciendo `ingréselo`".
En la
misma línea, Luis Fontana, gerente médico de Gestión de OSDE, dijo con tono
irónico que "nadie se va a poner en contra de una ley que legisle la
cobertura de una discapacidad, sobre el alcoholismo, los trastornos
alimenticios".
Del
mismo modo satirizó que "ninguno podría argumentar seriamente en contra de
lo que es la frutilla de la torta, que es la ley de fertilización asistida, la
última invitada a la fiesta".
Señaló
que "hay legislaciones que pasan desapercibidas", y sostuvo que
"el poder de lobby de las asociaciones de consumidores tiene mucho más
llegada al Gobierno y a los medios de comunicación" que las entidades de
medicina prepaga.
Fontana
enumeró "la ley de medicación por hepatitis crónica, la de ligadura de
trompas o contracepción quirúrgica, la de tratamiento hormonal de
emergencia", y destacó que "todas coinciden en que fueron sancionadas
desde 2007 en adelante".
También
mencionó a la "ley de drogadependencia", y puntualizó que "por
supuesto que antes se cubría, pero se agregaron muchísimas más coberturas"
a la patología".
En el
mismo orden, indicó la ley de "conductas alimentarias, anorexia y
bulimia", y subrayó que "también antes se venía cubriendo de manera
más que suficiente, pero le agregaron coberturas que, si se analizan desde el
rigor científico, no tienen razón de ser".
Asimismo,
se refirió a la "ley de obesidad mórbida", y puso de relieve que
durante el año pasado en OSDE se cubrieron "dos mil procedimientos
quirúrgicos, muchos de pacientes que ingresaron con enfermedades preexistentes
y hubo que cubrirlas".
Fontana
también señaló que la "ley contra la celiaquía" (...) "agrega
obligaciones tales como cubrir mezclas especiales, que terminan generándose por
orden de un juez en una especie de delivery a domicilio".
En su
enumeración también incluyó a la "ley de asistente domiciliaria", y
la del "alcoholismo", y las "leyes de discapacidad", e
insistió con que "el poder de lobby de ciertas asociaciones agrega
reglamentaciones y decretos nuevos que salen permanentemente con nuevas coberturas".
Del
mismo modo se refirió a lo que denominó "la frutilla de la torta: la
fertilización asistida".
"No
se tomaron el tiempo de consultar a nadie que supiera de fertilización asistida
ni de infertilidad. Esta ley es una aberración científica", sostuvo
Fontana.
Consideró
que esa ley "no tiene ningún tipo de rigor técnico", y opinó que
"es probable que hayan sido asesorados por grupos de lobby o por
condicionamientos o especulaciones políticas".
Después de ver todas sus "fantásticas" conclusiones, la pregunta es ¿sabrán que tratan con gente y no con entidades?