El voto útil arrasa en Cataluña, que contribuye decisivamente a la victoria del PSOE

La CiU a pesar de bajar en porcentaje ha conseguido mantener sus 10 diputados. El partido, por boca de Josep Antoni Duran i Lleida ha dicho que esperan que les llamen (en referencia a los pactos futuros). La coalición nacionalista moderada se ha felicitado por la resistencia ofrecida al bipartidismo. A pesar de su triunfalismo el resultado de CiU es uno de los más malos de las últimas legislaturas.

El gran perdedor ha sido ERC, el partido no ha conseguido revalidar su grupo parlamentario a causa de la pérdida de casi la mitad de sus votantes. Horas antes de terminar el escrutinio Joan Puigcercós ha dado la cara para reconocer que no ha sido un buen resultado. No sabemos si ese reconocimiento apaciguará a unas bases acostumbradas a montarla incluso cuando las cosas no van mal.

En un primer análisis lo que se ve es que los votos de ERC no han ido a CiU, en muy pocas ocasiones al PSC y mayoritariamente a la abstención. Los votantes clásicos de ERC no han entendido la ejecutoria de los republicanos en el parlamento de Madrid.

Por su parte, ICV, ha aguantado el tirón del bipartidismo. No ha conseguido llegar a tres diputados por Barcelona, que era lo que esperaba, pero ha mantenido dos diputados que le permiten mantener la cuota que los rojiverdes tenían en el Congreso.

Por lo que se refiere al PP, la polarización no ha servido para mejorar mucho sus resultados. A poco de finalizar el escrutinio los conservadores habían pasado de 6 diputados del año 2004 a 7 con una ganancia de poco más de un punto porcentual. Poco para aspirar ser contribuyentes natos a una victoria popular en el conjunto español.

Elementos destacables son, si no se da un cambio importante, que la batalla de Girona, en la que el PP intentaba evitar no tener presencia en esta provincia, ha sido ganada por ERC que ha mantenido uno de los dos diputados que tenía. En sentido inverso, en Lleida, el PP recupera el escaño perdido en 2004 y José Ignacio Llorens recupera el acta. Así ha conseguido evitar que ERC tuviese escaño por esta circunscripción.

Esquerra, la gran perdedora en Cataluña

ERC ha sido sin duda, las matemáticas no engañan, la fuerza política que más ha perdido en Cataluña. Los republicanos han tenido que librar cuatro batallas y las han perdido todas.

La primera ha sido la mediática. Esta vez no han tenido la maquinaria de los medios cercanos al PP demonizándolos y en consecuencia, tampoco se ha dado una reacción a la contra que sobrepase los límites del partido.

El segundo elemento ha sido la polarización entre las dos grandes fuerzas políticas españolas, que ha dejado en un segundo plano a las fuerzas nacionalistas periféricas y dentro de estas se han priorizado los grupos mayores en detrimento de los pequeños.

El tercer elemento ha sido la baja aportación del candidato Joan Ridao a la movilización de los republicanos independentistas.

Finalmente, en clave interna, los dirigentes de ERC no han conseguido movilizar a sus propias fuerzas que, en muchas ocasiones han engrosado la abstención o el voto testimonial.

Se prepara, pues una movida en el interior de ERC. Una de sus corrientes internas no ha esperado a que se cerraran las urnas para pedir que el partido renegocie su presencia en el gobierno catalán, con lo que las tortas están servidas. Carod no se moverá ni un milímetro de las posiciones conseguidas en el gobierno catalán, y la guerra, está servida.

Uno de los elementos que deberá analizar la cúpula de ERC es porqué ha recibido un voto de castigo y porqué los votos que le han dejado han ido a parar a la abstención y también a engrosar el porcentaje del PSC.