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Operación 'Madeja'

Castaño pide su libertad y la nulidad de la causa por no haberse respetado las normas de reparto

Castaño pide su libertad y la nulidad de la causa por no haberse respetado las normas de reparto

viernes 19 de julio de 2013, 18:59h
El abogado del exdirector del área de Vía Pública del Ayuntamiento de Sevilla y exasesor del grupo socialista Domingo Enrique Castaño ha recurrido el auto de prisión dictado en la madrugada del pasado viernes por la juez de Instrucción número 6, Mercedes Alaya, y ha solicitado la nulidad de las actuaciones, en las que se investiga si Castaño pudo recibir dádivas a cambio de la concesión de contratos de mantenimiento a las empresas Fitonovo y Fiverde.

El letrado de Castaño, José Manuel García-Quílez, ha informado a Europa Press de que ha sido este viernes cuando ha presentado ante la Audiencia Provincial de Sevilla un recurso en el que pide la inmediata excarcelación de su patrocinado, pues entiende que la medida de prisión "es desproporcionada".

En el recurso de apelación, de más de 20 páginas, el abogado del imputado también recurre la fianza de responsabilidad civil de 7,6 millones de euros que le impuso la juez Alaya, una cantidad que entiende que es, cuanto menos, "desorbitada".

El abogado niega en el recurso que su cliente haya recibido dádivas a cambio de la concesión de contratos, como un vehículo marca Audi, teléfonos móviles o un sobre con 30.000 euros, poniendo de manifiesto, asimismo, que Domingo Enrique Castaño "era un mero asesor sin competencias para adjudicar nada".

De igual modo, solicita la nulidad de todo lo actuado hasta el momento, pues entiende que "no se han respetado las normas de reparto" y que el caso "es nuevo" y "nada tiene que ver" con el caso Mercasevilla que investiga Alaya, por lo que el Juzgado de Instrucción número 6 de Sevilla "tendría que haberlo remitido a reparto", según las fuentes consultadas por Europa Press.

Hay que recordar que, dentro de la operación 'Madeja', agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil detuvieron tanto a Castaño como a su mujer, la abogada Ana María Vaquero, al administrador de la empresa de infraestructuras y medio ambiente Fitonovo, Rafael González Palomo, y al exadministrador de Fiverde Ángel Manuel Macedo.

Tras pasar a disposición judicial, y sobre las 4,45 horas de la madrugada del viernes 12 de julio, la magistrada ordenó el ingreso en prisión sin fianza de Castaño por los presuntos delitos de cohecho, prevaricación, blanqueo de capitales y fraude y exacciones ilegales. Asimismo, le impuso una fianza de responsabilidad civil de 7,6 millones de euros, frente a la petición de 360.000 euros planteada por el Ministerio Público.

La juez tomó esta decisión después de que el imputado se acogiera a su derecho constitucional a no declarar, como ya hizo ante la Guardia Civil.

EL SOBRE CON 30.000 EUROS

De su lado, la instructora dejó en libertad sin fianza a su esposa, quien también se acogió a su derecho a no declarar y a la que imputa los delitos de cohecho, prevaricación y blanqueo de capitales. Así, únicamente acordó que se le retirara el pasaporte.

Asimismo, la juez acordó dejar en libertad con cargos y sin fianza a los dos empresarios.

Durante su declaración ante la juez, el administrador de Fitonovo aseguró que, entre los años 2005 y 2006, entregó un sobre con 30.000 euros a Domingo Enrique Castaño y que le dijeron que este sobre con la cantidad de dinero referida "era para el PSOE", punto en el que subrayó que el dinero entregado "no era a cambio de nada", porque además "los contratos ya estaban dados".

ENTREGA DE TELÉFONOS MÓVILES

También dijo que entregó a Castaño siete teléfonos móviles Nokia para que los repartiera, aunque no precisó quiénes serían los últimos destinatarios de estos teléfonos.

Esta operación viene derivada de la investigación en torno a las supuestas irregularidades detectadas en el concurso promovido para enajenar los suelos de Mercasevilla, en el marco de la cual la magistrada pidió a la Guardia Civil que investigara el enriquecimiento "sospechoso" de Castaño, cifrado en unos 300.000 euros.

A raíz de esta investigación, los agentes habrían llegado a la conclusión de que Domingo Enrique Castaño pudo recibir dádivas a cambio de la concesión de contratos de mantenimiento a las empresas referidas.

Además de los cuatro detenidos, la Guardia Civil imputó en el marco de la operación 'Madeja' a la mujer del administrador de Fitonovo, Pilar Baró, y al responsable de una gestoría que le llevó las cuentas a esta empresa.
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