La Fundación Atarazanas censura el proyecto de 'La Caixa' por "travestir" el monumento y celebra el traslado

La Fundación Museo Atarazanas, constituida en torno a las Reales Atarazanas de Sevilla, construidas en 1252 bajo el reinado de Alfonso X y declaradas Bien de Interés Cultural (BIC), ha convocado para el 24 de noviembre a las 12,00 horas una concentración a las puertas del antiguo astillero. La organización conservacionista, que en junio acordaba un convenio de colaboración con 'La Caixa' respecto al proyecto de rehabilitación del monumento y su transformación en un espacio cultural 'Caixafórum', ha aplaudido que las Atarazanas no alberguen finalmente este proyecto alegando que no comparte que el monumento sea "travestido" o sufra "amputaciones".

La Junta de Andalucía, como es sabido, había acordado con la 'Fundación La Caixa' la cesión durante 75 años del antiguo recinto de las Reales Atarazanas, declaradas Bien de Interés Cultural, al objeto de que la entidad bancaria rehabilitase el monumento y crease allí un nuevo espacio cultural merced a la propuesta de intervención diseñada por el arquitecto Guillermo Vázquez Consuegra. El pasado mes de junio, de hecho, la Fundación Museo Atarazanas y 'La Caixa' alcanzaron un acuerdo en torno a un convenio de colaboración para el desarrollo de este proyecto de intervención, dado que el colectivo había mostrado sus dudas respecto a la naturaleza del proyecto de restauración.

TRASLADO DEL PROYECTO

Pero finalmente, la 'Fundación La Caixa' ha decidido no materializar en las Reales Atarazanas su proyecto de centro cultural. Tras no prosperar la iniciativa en la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento hispalense, que reclamaba un plan especial que la Junta de Andalucía cree innecesario, la entidad bancaria ha resuelto instalar su centro cultural en el complejo de la torre de 178 metros de altura que, desde hace años, promueve en el sector sur de la Isla de la Cartuja la caja de ahorros Cajasol, recientemente fagocitada por 'Caixabank'.

Pues bien, el presidente de la Fundación Museo Atarazanas, José Manuel Núñez de la Fuente, ha celebrado este jueves una rueda de prensa acompañado de otros miembros de la fundación, al objeto de analizar el nuevo escenario que afronta el monumento a cuenta de esta decisión de 'La Caixa'. Acompañado de otros miembros de la organización, Núñez de la Fuente ha aplaudido que la 'Fundación La Caixa' haya desistido finalmente de instalar en las Reales Atarazanas su proyecto de centro cultural polivalente y haya trasladado al complejo de la torre Pelli esta iniciativa al tratarse de un enclave "más coherente" para la iniciativa.

CRÍTICAS AL PROYECTO

Porque, según ha manifestado Núñez de la Fuente, pese a que 'La Caixa' había introducido "elementos correctores" a su proyecto para restarle "agresividad" en materia de protección de patrimonio histórico, las Reales Atarazanas constituyen un monumento que "no puede ser travestido". "Este proyecto no garantizaba la rehabilitación integral del monumento, sino más bien su amputación parcial, acompañada de una inquietante contaminación visual", ha dicho.

Si bien la organización ha tenido algún reconocimiento para con 'La Caixa', con la que alcanzó el mencionado acuerdo, Núñez de la Fuente ha tachado este jueves de "oscuro" el proyecto de intervención y ha avisado de efectos en "tres crujías medievales y una escalera del siglo XVIII", además de la "contaminación" visual de buena parte del antiguo astillero. "Esto no se puede hacer", ha manifestado Núñez de la Fuente, toda vez que el proyecto contaba con el informe favorable de la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico.

ALUSIÓN A LA UNESCO

Incluso ha opinado que con este proyecto, "probablemente", la Organización de las Naciones Unidas para la Ciencia, la Educación y la Cultura (Unesco), habría "expulsado definitivamente" de su lista de Patrimonio Mundial a los monumentos sevillanos declarados Patrimonio de la Humanidad --la Catedral, el Alcázar y el Archivo de Indias--, toda vez que la última sesión del Comité de Patrimonio Mundial no incluyó a tales monumentos en la lista de patrimonio mundial en peligro pese a la propuesta que pesaba a cuenta de la mencionada torre de 178 metros de altura. Núñez de la Fuente, en ese sentido, ha argumentado el papel de la Unesco tras la "tarjeta amarilla, casi roja" implícita en el conflicto de la torre, salvado finalmente sin la inclusión de los monumentos sevillanos en la lista del patrimonio mundial en peligro.

De esta manera, Núñez de la Fuente ha reclamado una "rehabilitación integral" del monumento en función de un proyecto "adecuado" a su naturaleza y "concepto patrimonial", manifestándose a favor de que la intervención cuente con un plan especial. Así, ha llamado a participar en la concentración convocada el 24 de noviembre para reclamar a la Administración andaluza, dueña del monumento, su rehabilitación integral y un proyecto cultural acorde con la naturaleza del antiguo astillero.