Aumentan las sospechas de compra-venta de partidos en Segunda pero no habrá investigación penal

Las conversaciones de teórica compra de partidos para que el Hércules ascendiera -como así sucedió finalmente, y grabadas a Enrique Ortiz, empresario al que se cita en el caso Gürtel e implicado por cohecho, tráfico de influencias y fraude en el caso Brugal, se hallaron casualmente y por ello el titular del Juzgado 7 de Alicante, las considera una intromisión en su vida privada y ha decidido archivarlas.

Con ello frustra la petición del fiscal de que las enviara al Consejo Superior de Deportes (CSD) y a la Federación Española de Fúbtol.(RFEF) para que  siguieran con la investigación. Además, también estima José Luis de la Fuente, en un auto calificado como muy bien redactado, que actualmente no son delito estas acciones, que lo serán cuando entre en vigor la nueva Ley del Deporte, a partir del 22 de diciembre.

Ello no quita para de la escucha de las conversaciones se deduzca claramente el intento de compra de cuatro partidos por parte del club herculano, frente a Salamanca, Córdoba, Girona y Recreativo de Huelva. En algunos casos con ofrecimiento de 300.000 euros, e incluso de 100.000 para el portero del Córdoba, Raúl Navas, que encajó cuatro goles, aunque él niega haber recibido dinero.

No sólo se deduce esta actuación sospechosa del máximo accionista del club alicantino, sino que, según la información de 'El País', éste acudió presuntamente a Jorge López, conocido profesionalmente como Tote, el capitán del club, para que hiciera de intermediario del ofrecimiento del dinero a estos cuatro rivales en la parte final de la temporada que acabó con el ansiado ascenso del Hércules a Primera.

Clubes perjudicados

Hay frases tan claras y directas como ésta de Ortiz: "Íbamos a dar 300.000 al equipo -el Córdoba- pero dijo que no se vendía; entonces cogimos al portero y le dimos 100.000". O esta del capitán  Jorge López: "Crack, soy Tote: prepara el dinero para estos. Tenemos que dárselo el domingo, 25.000 más 150.000".

Aunque clubes que se consideran perjudicados en sus intereses como Real Betis Balompié -se quedó sin ascenso a Primera al hacerlo en su lugar el Hércules- o el Cádiz -que descendió a Segunda B-  piden a CSD y RFEF que intervenga, la decisión del juez Fuentes puede dejar todo en agua de borrajas y en condena moral sin efectos jurídicos ni deportivos.