red.diariocritico.com

Tridente contra el Gobierno por el caso Faisán

El PP acusa a Rubalcaba de ocultar datos a la investigación

· ' Chivatazo' a ETA: el investigador apunta a los policías

Auténtico tridente contra el Gobierno por el 'caso Faisán': Sáenz de Santamaría, Gil Lázaro y Cosidó han puesto contra las cuerdas a la vicepresidenta Fernández de la Vega y al ministro Rubalcaba, al que han acusado de saber perfectamente quién dio el chivatazo, por qué se dio, cómo se dio y quién lo ordenó y, por lo tanto, de ocultar datos a la investigación. La ofensiva popular por el chivatazo policial a ETA no se va a detener durante todo el periodo de sesiones.
Durante la sesión de control al Gobierno, inmediatamente después del debate sobre política económica en el Congreso de los Diputados, la portavoz del Grupo Popular, Soraya Sáenz de Santamaría, le ha dicho a la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega que “el silencio no va a librar de sospechas la actuación de algunos” y que “sólo quien tiene algo que esconder en el Gobierno trata de ocultar la verdad en el Parlamento”.

     Sáenz de Santamaría fue la primera en actuar en ataque en tridente contra el Gobierno socialista por uno de los mayores escándalos policiales de los últimos años: el chivatazo a ETA de que las policías hispano-francesas iban a actuar contra la red de financiación de la banda terrorista, un 'chivatazo' que se produjo cuando el Gobierno y ETA mantenían sus primeras sesiones negociadoras, en mayo de 2006. Detrás de Sáenz de Santamaría interpelaron al ministro del Interior sobre el mismo tema los diputados Ignacio Gil Lázaro e Ignacio Cosidó.

     Sáenz de Santamaría exigió a la vicepresidenta primera una respuesta concreta en torno a si hubo una instrucción política en el chivatazo a ETA e instó a Fernández de la Vega a dar dicha respuesta porque “la Policía no puede seguir siendo comprometida” por el Gobierno “con su silencio” y porque “no se puede poner en entredicho el prestigio del Estado de Derecho, que es el principal instrumento de una lucha unánime y sin cuartel contra el terrorismo”.

    La dirigente “popular” recordó a Fernández de la Vega que, desde que el pasado mes de octubre la vicepresidenta se negara a contestar una pregunta sobre el Caso Faisán en la sesión de control, el ministro Rubalcaba “desde entonces ha venido combinando el escapismo parlamentario con la falsedad”. Dijo, al respecto: “El pasado miércoles, a preguntas del Grupo Popular, el ministro de Justicia despachaba el tema diciendo que son sólo rumores”.
 

Gil Lázaro y Cosidó: Rubalcaba, "un Houdini parlamentario"

Luego, Gil Lázaro y Cosidó acusaron hoy al ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, de saber perfectamente quién dio el chivatazo, por qué se dio, cómo se dio y quién lo ordenó, en referencia al caso Faisán. Cosidó argumentó que en la investigación policial sobre el caso Faisán hay registradas dos llamadas entre uno de los imputados, la dirección general de la Policía en ese momento y el Secretario de Estado de Seguridad.

     “El secretario de Estado de Seguridad se ha declarado amnésico y además no parece que tenga mucha voluntad de venir a esta Cámara a explicar de qué hablaron”, dijo Cosidó, quien, tras la respuesta de Rubalcaba de que es normal que ambos cargos hablen por teléfono, apuntó que “la Audiencia Nacional decidió hace dos días, que se va a seguir investigando este caso en una resolución que, seguro le satisface tanto como a mí”.

     “Por tanto aquí no hemos venido a dirimir responsabilidades penales, sino algunas responsabilidades políticas”, explicó el portavoz del PP, quién destacó que “es muy normal que un Secretario de Estado de Seguridad y un Director General de la Policía hablen frecuentemente”. Ahora bien, “hay dos anomalías importantes en estas conversaciones que exigen una respuesta por su parte”. La primera anomalía es que “no es nada normal, no ha ocurrido nunca en ningún país del mundo, que un Director General de la Policía sea imputado por un delito de colaboración con banda armada”. La segunda anomalía, según Cosidó, es que “cuando un Director General de la Policía y un Secretario de Estado de Seguridad hablan lo hagan con el mismo teléfono que utilizan los terroristas cuando hablan con el Ejecutivo en la negociación con ETA”.

    En definitiva, calificó a Rubalcaba de "Houdini parlamentario”, es decir, de escapista, y le pidió el cese de Antonio Camacho como secretario de Estado de Seguridad, porque "lo que España no puede permitirse es tener a un Secretario de Estado de Seguridad bajo sospecha”.

    Ignacio Gil Lázaro, por su parte, acusó al ministro de venir al Parlamento “a pasar el trámite, para hablar de lo divino y de lo humano” sin ofrecer una respuesta concreta. "Sobre eso usted no sólo no ha hablado en esta Cámara, sino que ha tratado de evitar bajo cualquier forma que se pudiera esclarecer la verdad”, dijo Gil Lázaro.
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios
ventana.flyLoaderQueue = ventana.flyLoaderQueue || [] ventana.flyLoaderQueue.push(()=>{ flyLoader.ejecutar([ { // Zona flotante aguas afuera ID de zona: 4536, contenedor: document.getElementById('fly_106846_4536') } ]) })