España, denunciada ante el Tribunal de Derechos Humanos por el nacionalismo vasco

Este martes, 3 de febrero, una delegación de Eusko Alkartasuna (EA) saldrá de Biarritz con destino a Estrasburgo para denunciar a España ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos por impedir que Juan José Ibarretxe pudiera realizar una consulta en Euskadi sobre su plan soberanista. Lo ha confirmado en Madrid Unai Ziarreta, presidente de EA, formación que en esta ocasión concurre en solitario a las elecciones autonómicas del 1 de marzo en el País Vasco.

Ziarreta acudió a Madrid a un desayuno de Nueva Economía Forum acompañado por tres de los consejeros de EA en el Gobierno vasco: Joseba Azkárraga -Justicia, Empleo y Seguridad Social-, Esther Larrañaga -Medio Ambiente- y Tontxu Campos -Educación, Universidades e Investigación-. Un desayuno informativo, sin embargo, que no levantó las expectativas de otras ocasiones: escasa presencia mediática y política: sólo asistió como ‘acompañante’ el diputado de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Joan Tardá.

   
Normalización soberanista

Por lo demás, pocas novedades en la intervención de Ziarreta. El líder de EA apostó por el soberanismo como única fórmula para la ‘normalización política’ en Euskadi. En ese sentido, sólo un proceso similar a los de Québec o Escocia podrían clamar las expectativas nacionalistas. Se quejó, igualmente, de que el Estado -independientemente del color político que gobierne en Moncloa- ha impedido el desarrollo pleno del Estatuto de Guernica -Ziarreta mantiene incólume la reivindicación de 36 competencias que el Estado ‘niega a Euskadi’-, un Estatuto, no obstante, que ya ha sido superado: completar el Estatuto es el “punto de partida”, no el de llegada, que es el derecho a la autodeterminación.

Ziarreta se mostró confiado en las posibilidades electorales de EA, que para los comicios del 1 de marzo se presenta en solitario: cree que su formación será determinante para la formación de un nuevo Gobierno en Euskadi. No es eso lo que dicen las encuestas, pero ¿recibirán el voto de la izquierda abertzale en el caso de que los ‘herederos de Batasuna’ no sean legalizados? “Es muy voto muy militante y de ahí es muy difícil que se puedan desviar votos”, reconoció.

En todo caso, Ziarreta tuvo palabras muy duras contra el socialista Patxi López, sobre quien dijo que “actúa como un delegado del Gobierno en Euskadi, como un mando a distancia de Madrid”. En este sentido, el líder de EA ve al PSE como la antítesis del PSC; es decir, que Patxi López no tiene ninguna autonomía en Euskadi, mientras que José Montilla sí la tuvo en Cataluña, incluso para romper el pacto entre Zapatero y el nacionalista Artur Mas, según el cual Mas gobernaría en Cataluña con apoyo del PSC. Montilla se opuso y preside la Generalitat. López no podrá hacer lo mismo, según Ziarreta, porque el PSE no actúa sino desde el “mando a distancia” de Madrid.

En otro orden de cosas, Ziarreta reconoció que en las conversaciones de Loyola entre el PNV, el PSE y Batasuna “estuvieron cerca de lograr un acuerdo” para el fin de la violencia en Euskadi, pero que en todo caso se trató de ‘otra oportunidad perdida’. Pero en ese contexto, el líder de EA ha reconocido en Madrid que “conversaciones las tenemos con todas las fuerzas políticas; también con los abertzales, porque está en nuestro ADN”. Complicadas declaraciones, en vista de lo sucedido a Ibarretxe y a López tras sus encuentros con Arnaldo Otegi.