Un viaje en el Prevebús

“El objetivo de este taller es sensibilizar a los niños sobre la importancia que tiene la prevención de riesgos en todas las facetas de la vida, acercando a los chavales los valores de la seguridad y la salud y generando hábitos de conducta seguros en los futuros trabajadores y empresarios”, asegura Carmen Arenas, directora técnica de SICMA.

La financiación de este proyecto ha corrido a cargo de la Consejería de Empleo y Mujer, y en concreto del Instituto Regional de Seguridad y Salud en el Trabajo. Gracias a SICMA, en concreto a dos de sus autobuses, se han dispuesto dos aulas móviles que visitarán en total 280 colegios públicos y concertados de todo Madrid. Esta vez la parada del prevebús ha tenido lugar en el colegio Santa María del Pilar, situado en la Plaza de los Reyes Magos, número 6 de Madrid.

En este centro educativo se está impartiendo el taller a niños de 3º y 6º de Primaria, pequeños con edades de entre 8 y 12 años. “Ha sido muy divertido. Nos han enseñado cómo ir por la calle y que tenemos que hacer caso a todas las señales. A partir de ahora intentaré hacerlo todo con más cuidado y fijándome en las cosas”, dice Cristina, alumna de 6º de Primaria.

Los dos autobuses están dotados de equipos para la proyección de vídeos educativos, y cada uno cuenta con pupitres equipados con un ordenador para cada alumno. Además, en cada aula móvil viajan dos monitores, por lo que en  nuestra comunidad son cuatro los que trabajan en este proyecto, todos ellos expertos en prevención de riesgos laborales.

Ellos son los encargados de impartir los talleres. “Llevamos tres años advirtiendo a los niños de los múltiples riesgos que pueden encontrarse en su vida cotidiana. Ellos, por su edad, no creen que les pueda pasar nada malo hagan lo que hagan. Tienen la inconsciencia propia de su edad, pero al venir al Prevebús se dan cuenta del peligro que corren en muchas situaciones y de que tienen que cambiar su conducta”, explica María Dolores Casco, monitora del taller.

Los alumnos reciben, en primer lugar, unas nociones básicas relativas a los riesgos más frecuentes en su entorno y la manera de prevenirlos. “Tenemos dos programas diferentes, uno para los más pequeños y otros para los mayores. A los peques les enseñamos viñetas que reflejan diferentes situaciones de riesgo cotidiano. En cambio a los que son un poquito más mayores les ponemos un vídeo de un personaje de animación al que nosotros llamamos Napo y que encarna al típico adolescente despreocupado que va pasando de todo lo que se le dice y haciendo lo que a él le viene en gana sin pensar en si corre peligro o no”, explica Almudena Sebastián, la segunda monitora de este Prevebús.

Una vez finalizada esta parte teórica los alumnos, tanto mayores como pequeños,  pasan a jugar al 'Privial', un juego de preguntas y respuestas sobre prevención que permite a los monitores comprobar que los alumnos han asimilado los conocimientos impartidos durante la clase previa. El colegio que mejor puntuación saque en este Privial ganará una visita de la clase a un parque temático de la región. “Nosotros seguro que ganamos, porque hemos contestado bien a todas las preguntas” dice Beatriz, de 12 años. “Nos ha gustado mucho el taller porque hemos hablado de muchos temas con las monitoras. Nos han enseñado cosas y además nos hemos reído mucho con las historias de Napo, que es un desastre”, añade.

Cada día, estas aulas móviles permanecen en los colegios durante toda la jornada escolar para que, por el orden que establezca la dirección del centro, los alumnos realicen la actividad programada en grupos de 15. La duración de cada  taller es de 45 minutos.

Los talleres se imparten de 1 de febrero a 30 de noviembre. La Consejería de Empleo y Mujer puso en marcha este programa en el 2006, y durante el pasado año más de 9.000 alumnos de 109 centros públicos pasaron por ambas aulas móviles.