Un año más, después de las fiestas navideñas, es hora de dar paso a las rebajas de enero. Ropa, complementos, zapatos, productos de electrónica o muebles son sólo algunos de los artículos que pueden adquirirse estos días a precios mucho más asequibles de lo que es habitual. La temporada oficial comenzó el pasado 1 de enero, pero no es hasta después de Reyes cuando la mayoría de tiendas cuelgan su cartel de 'rebajas'.
Según el director de Comercio y Servicios de la Cámara de Comercio de Madrid, Francisco Espasadín, los artículos que más se consumen durante este periodo son los precedentes del textil que, a su juicio, es el sector "estrella" en estas fechas.
La Asociación Empresarial de Comercio Textil y Complementos (ACOTEX), prevé que en esta temporada se ofrecerán descuentos y ofertas mucho mayores que en años anteriores, por lo que los consumidores "van a tener la oportunidad de disfrutar de las rebajas más atractivas de los últimos años, tanto en precio como calidad y variedad de los artículos rebajados".
Pero también hay que ser precavidos con lo que se compra, ya que, según afirmó la directora General de Consumo de la Comunidad de Madrid, Carmen Martínez de Sola, entre el 10 y el 15 por ciento de los comercios cometen irregularidades y enero es uno de los meses con mayor número de quejas.
A través del portal de Internet de la Cámara de Comercio, los comerciantes pueden acceder a información orientativa para intentar subsanar estos errores. Pueden plantearse dudas respecto al etiquetado, restricciones al uso de tarjetas de crédito, etc. "Los productos deben ser comprados expresamente para las rebajas, no pueden ser de stock o excedentes. Además es obligatorio que se mantenga el precio anterior al rebajado", afirma Espasandín y añade que "la mayoría de las irregularidades son consecuencia de la falta de información del comerciante que en querer cometer alguna falta en relación con la normativa".
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Para que no se cometan fallos, los consumidores deben recordar que la normativa de consumo vigente establece que los productos en rebajas también tienen una garantía de dos años, y los establecimientos están obligados a devolver íntegramente el dinero del producto si este resulta defectuoso. Respecto a la forma de pago, ésta debe ser la misma que el resto del año, a no ser que el vendedor especifique lo contrario en un cartel bien visible.
Lo cierto es que, a pesar de la cuesta de enero, los centro comerciales se llenaron de clientes dispuestos a gastar sus ahorros en las últimas tendencias. Las interminables colas para pagar y entrar a los probadores, la histeria de muchas personas y el agotador trabajo de los dependientes, hacen que las rebajas no resulten tan atractivas para muchas personas.
Para algunos establecimientos, las rebajas suponen casi el 27 por ciento de las ventas totales. Según los comerciantes, el negocio está en que permiten liquidar la mercancía que no se ha vendido durante la temporada e invertir ese dinero en renovar los productos.
Para la Confederación de Consumidores y Usuarios de Madrid (CECU), el gasto por persona será de 141 euros, sólo dos euros más que en 2007. El portavoz de CECU, Antonio López, afirmó que este año “la situación no es muy buena y por consiguiente la subida es muy escasa”.
Además, es necesario que los consumidores compren 'con cabeza' y sigan recomendaciones como planificar los gastos, tener en cuenta que no es mejor un producto sólo porque esté barato, comparar precios, y tener acudir al respaldo legal en caso de irregularidades. A pesar de todo, si se hace un gasto responsable, las rebajas pueden resultar muy rentables para los bolsillo de más de uno.
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