La 'otra cara' del Día de la Constitución

Alonso minimiza su ausencia en la izada de bandera en Colón

El ministro de Defensa, José Antonio Alonso, restó este miércoles importancia a su ausencia del solemne acto de izada de la enorme bandera de España que ondea en la madrileña Plaza del Descubrimiento de Colón y que se celebró antes de que comenzara la recepción institucional en el Congreso de los Diputados.

Preguntado por las razones de su inasistencia, - detalle que fue reprochado en privado por algunos destacados miembros del PP- , Alonso señaló a este Diario que en esta ocasión no  creía necesaria su presencia  destacando, en contraste, que acude a  actos similares en otras señaladas fechas, como el 12 de Octubre, Fiesta de la Hispanidad.

El acto, presidido por los presidentes del Congreso y del Senado, Manuel Marín y Javier Rojo,  respectivamente, quedó “muy descafeinado”, según comentaban en el PP, por culpa de otras notables ausencias. De hecho, de la Mesa del Congreso  solo asistieron María Jesús Sainz, y Gabriel Cisneros, del PP, y Javier Barrero, en representación del PSOE. Las ausencias más significativas fueron las de los miembros de CiU, PNV, IU y Entesa Catalana de Progrés.

El homenaje a la enseña nacional que fue  instaurado por el ex ministro de Defensa Federico Trillo, del PP,  en 2002, se celebra mensualmente, aunque cuatro veces al año se hace de manera extraordinaria, una de ellas, coincidiendo con el aniversario de la Día de la Constitución. El socialista José Bono, sucesor de Trillo, demostró “mucho entusiasmo” con estos actos, recordaban los mismos dirigentes de la oposición.

A Llamazares le basta 'con la Vicepresidencia'

Ironía también la hubo en la fiesta de la Constitución. Y esta vez protagonizada por
el líder de IU, Gaspar Llamazares. En su comparecencia ante la prensa, unos minutos antes, Mariano Rajoy dijo que PP y PSOE deberían consensuarlo todo porque son los dos partidos que gobernarán alternativamente en los próximos años. Y, en ese sentido, hizo una referencia a IU: según la encuestas "y por el momento, no parece que Llamazares llegue a ser presidente del Gobierno", ironizó el galaico.

Pues bien, Llamazares estaba esperando su 'turno' para usar el Vestíbulo de Isabel II para comparecer ante los medios. Cuando conoció la 'gracieta' de Rajoy nos dijo que "me basta con la Vicepresidencia". Es decir, que puede que no sea presidente del Gobierno, pero ¿una Vicepresidencia en un futuro? Quién sabe.

El sustituto/a de López Aguilar en Justicia, un enigma

No hubo manera de que Zapatero ‘soltara prenda’ sobre quien será el próximo ministro o ministra de Justicia pese a haber reconocido momentos antes que ya tenía decidido quien sería. “No voy a jugar a las adivinanzas”, contestó el presidente sonriente. ¿Será una mujer como había adelantado hace algunas semanas?, le preguntamos.  “Sabéis que me gustan mucho las ministras”, fue lo único que añadió el presidente, enigmático. “Lo único que sé seguro es que Juan Fernando será el próximo presidente de Canarias”, sentenció el presidente.

Precisamente entre los corrillos de invitados andaba la vocal del Consejo General del Poder Judicial, y presidenta del Observatorio para la Violencia de Género, Monserrat Comas, cuyo nombre ha ‘sonado’ en las quinielas. Comas reconoció que le “habían llegado” tales rumores pero confesó no saber nada sobre el asunto. Eso sí, bromeó sobre el asunto comentado que estará “atenta” al teléfono por si las moscas.

Montilla volverá a otra recepción constitucional si no le da “un infarto”

La presencia del presidente de la Generalitat, José Montilla, por primera vez en la celebración de la Constitución  española, pese a ser una noticia conocida, fue otro de las  focos de interés de la jornada. También el presidente aragonés, Marcelino Iglesias, del PSOE, por supuesto, – ni un presidente autonómico del PP acudió a la cita-  era la primera vez que asistía.

A Montilla, parco él en palabras, le costó lo suyo explicar, primero, que la decisión la había tomado “hace unos días”, y, segundo, los motivos por los que había decidido acudir a la recepción constitucional. “Es un gesto de normalidad. Es algo simbólico ¿no?. Gracias a la Constitución, Cataluña tiene ahora más competencias”, reconoció, después de mucho pensar, el ex ministro de Industria, quien repitió varias veces que “Pujol también vino alguna vez a Madrid a celebrar el aniversario de la Carta Magna” (la última, en 1988, hace casi veinte años, qué memoria).

“¿Piensa institucionalizar su presencia y volver el año que viene?”, se le preguntó, ya que estaba por la labor de hablar con la prensa. “No lo sé. Me puede dar un infarto al salir de aquí…”, añadió entre risas, dejando ‘helados’ a los periodistas que le desearon de inmediato que algo tan dramático no ocurriera…. 

Más ‘suelto’, el Honorable adelantó que tienen pensado acudir a La zarzuela a ver al Rey antes de la Navidades y después se reunirá con Zapatero, cita para la que no tienen aún fecha.  También señaló que tampoco tiene establecido el calendario para poner en marcha las comisiones bilaterales con el Gobierno para iniciar el desarrollo del Estatut, aunque dio a entender que será después de las vacaciones navideñas. “Hay tiempo. Lo importante es hacer las cosas bien”, dijo Montilla.

Mutismo de Rubalcaba sobre la marcha del proceso

Poco proclive estaba también el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, de comentar la marcha del proceso de paz con los periodistas con quienes mantuvo una ‘entretenida’ charla sobre fútbol…fundamentalmente.

Pese a todo, algunas cosillas – pocas, la verdad- se le pudieron sacar el ministro. Como por ejemplo, que seguirá hablando con los portavoces parlamentarios para informarles de asuntos referidos a la lucha antiterrorista-  “lo hago habitualmente”, recordó, - , o que la Fiscalía solo podrá impedir actos electorales de Batasuna si los convoca y realiza precisamente bajo estas siglas (algo obvio ya que la ‘marca’ Batasuna está ilegalizada), pero no “si van como X”.

“Habrá acercamiento de presos al País Vasco, como ha pedido ERC?”, se le preguntó al ministro. “Son cosas de Tardá” replicó, en alusión al portavoz republicano en el Congreso, del que dijo que era “buena gente”. Pero nada más. Al ver que el corrillo donde estaba se iba ampliando, Rubalcaba recomendó a los periodistas que se marcharán “tranquilamente de puente” porque “no iba a haber noticias”.

Un cóctel con más ausencias que presencias.

La Oposición es la Oposición y está para eso….para sacarle punta a todo y meter el dedo en el ojo al Gobierno. Así que muchos dirigentes del PP se dedicaron a resaltar la escasa asistencia de personalidades relevantes en este 28 aniversario de la Carta Magna. Era algo de razón tenían. Dos presidentes autonómicos- Montilla e Iglesias- como botón de muestra. Algunas autoridades militares, más bien pocas. De la Iglesia, si hubo representación, pasó desapercibida.

Y la brevedad del acto. Marín correcto. Muchos políticos abandonaron el Congreso antes de comenzar el cóctel. El primero, Manuel Fraga que nos explicó que iba con prisa porque había quedado en casa de uno de sus hijos que vive en las afueras de Madrid. Alberto Ruiz Gallardón, el alcalde de Madrid, también salió pitando en cuanto acabó de hablar Marín. Pero al menos tuvo el detalle de acudir, cosa no no hizo Esperanza Aguirre. El siguiente en desfilar fue el ex presidente  del Gobierno, Leopoldo Calvo Sotelo. Y tras él, otros muchos….

En el Salón de Pasos Perdido, mientras tanto, las bandejas de canapés y los aperitivos desparecían a velocidad de vértigo. Sobre todo los 10 kilos de angulas, que fueron vistas y no vistas. El responsable del catering, el restaurador Arturo, andaba por allí satisfecho al ver el éxito, aunque hubo algunos invitados  que no se quedaron del todo satisfechos y se quejaron de la escasez de bebidas.

Hasta el propio Rodríguez Zapatero tuvo que reclamar una cerveza. Como recompensa, el presidente se hizo varias fotos – de móvil- con los responsables de la cafetería del Congreso que raudos se apresuraron a ofrecerle la bebida.

La foto de Rajoy con el embajador de Irán

Anécdota curiosa, curiosísima, la de Mariano Rajoy en el Vestíbulo de Isabel II cuando, nada más finalizar su comparecencia ante los medios, se le acercó una persona muy empeñada en hacerse una foto con él. El líder del PP accedió graciosamente, aunque no le hizo gracia. Y vean por qué: "Hola, soy el embajador de Irán y quisiera hacerme una foto con usted". El gallego puso cara de póquer y se hizo la foto.

Pero hete aquí que el embajador iraní no paró allí y se acercó a Zaplana y Acebes, que hacían dúo unos metros más allá del líder de su partido, y les hizo la misma petición. Zaplana, más ladino, sonreía; Acebes mantenía su habitual cara de circunstancias y el iraní se salió con la suya: tuvo foto con ambos.

Gracia, mucha gracia, puede que no les hiciera a los del PP, pero, todo sea por la
'Alianza de Civilizaciones' (en la que, por cierto, ellos no creen).

La 'representación' policial

Generó expectación la presencia de dos 'destacados policías -el entrecomillado alto es por los ataques mediáticos que ambos están recibiendo- en la recepción oficial: el comisario general de la Policía Científica, Miguel Ángel Santano, y el subdirector general Telesforo Rubio.

Expectación, porque Santano fue llamado a declarar como imputado por la juez Gema Gallego en relación al 'caso del ácido bórico', es decir, lo que parece constituir todo un 'bluf', pero que se ha convertido en un 'culebrón' que nadie sabe cómo terminará.

Y expectación también porque Telesforo Rubio, de igual manera cuestionado por sectores mediáticos, salió de la Comisaría General de Información 'la más poderosa, sin duda, de la Policía- para ocupar una de las Subdirecciones en el nuevo organigrama llevado a efecto por el ministro Pérez Rubalcaba. Vamos, que la presencia de ambos en el Congreso el Día de la Constitución no pasó desapercibida.

Rajoy ironiza 'a la gallega' con Blanco y ZP

Otras anécdotas fueron protagonizadas por el propio Mariano Rajoy ante los periodistas. Dos son especialmente reseñables. La primera, cuando arremetió a su manera contra José Blanco, el influyente 'número dos' del PSOE. Y esto es lo que dijo: "El problema no es que haya un secretario de Organización; el problema [para Zapatero, o para el PSOE] es que exista un presidente del Gobierno dispuesto a permitir que haya un secretario de Organización como ése [el socialista José Blanco]".

Y la segunda, para Rodríguez Zapatero directamente. Comentaba Rajoy con su fina ironía gallega habitual que Zapatero 'no entiende' las propuestas del PP sobre el modelo de Estado y lo comparaba con su propio hijo pequeño: resulta que éste le tiró casi a la cabeza un avión mientras, estando en su casa, Rajoy ultimaba alguna de las propuestas que iba a presentar en la pasada Conferencia del PP: "A él [su hijo] también le debió de parecer una chorrada, pero, claro, él tiene un año y medio".

Mucho 'pasilleo' popular

Los 'mensajes' de Mariano Rajoy vinieron precedidos de numerosas anécdotas y de mucho 'pasilleo' por parte de él mismo, Eduardo Zaplana y Ángel Acebes. Tanto Zaplana como Acebes reunieron a nutridos grupos de periodistas mientras Rajoy, como señalábamos arriba, hablaba muy concentrado con Alberto Ruiz-Gallardón. ¿Qué le decía Rajoy a Gallardón? Queda para el reservado, pero es previsible que la 'ausente' Esperanza Aguirre estuviera presente en la conversación.

Más 'animado' estuvo el corrillo de Zaplana. El portavoz popular desarrolló ante los periodistas su curiosa teoría del adelanto electoral general al mes de marzo. Éstas son sus 'razones': que las encuestas -no se sabe cuáles- preconizan un'mazazo' para el PSOE en las elecciones municipales y autonómicas y que, claro, un desastre electoral así haría que el Gobierno perdiera expectativas de voto en las generales.

Además, que el proceso de paz en el País Vasco -según Zaplana- atraviesa por sus peores momentos y estaría al borde de la ruptura. Luego, lo más 'razonable' y 'lógico' es que se produzca un adelanto electoral. Veremos.

Zapatero descarta un adelanto electoral como sugirió Zaplana

El presidente del Gobierno tiene intención de mantener el calendario electoral. Es decir, no habrá adelanto de las generales, como iba augurando por los rincones del salón de Pasos Perdidos el portavoz del PP, Eduardo Zaplana, seguro de que los comicios serían ¡en marzo!, antes incluso que las municipales y autonómicas.

El presidente lo descartó categóricamente y aseguró que mantiene las mismas previsiones, ocurra lo que ocurra en el proceso de paz del que no comentar nada en los corrillos amparándose en que ya había hechos declaraciones ‘oficiales’. También descartó que una vez decidido el relevo del ministro de Justicia – no antes del año próximo- , Juan Fernándo López Aguilar, vaya a hacer una remodelación más amplia. “no veo más cambios”, dijo.

Zapatero y Rajoy no se saludaron

¿Las razones?…”No os las voy a decir”, contestó lacónico el presidente ante la insistencia de los periodistas, que según iban sumándose al corrillo querían saber cuando se vería con Mariano Rajoy en La Moncloa.

Lo cierto es que la frialdad entre ambos se palpó durante la recepción del Congreso. Ni un apretón de manos, ni un cruce de sonrisas. Cada uno anduvo por su lado. El presidente intentando todo el rato‘escaquearse’ de la presión de los periodistas que le acechaban para que mantuviera, como suele hacer siempre en estas recepciones, una conversación informal de pasillos, como así fue al final de la mañana aunque con pocas novedades.

Mucho fútbol y  bromas con Rubalcaba sobre los goles de Ronaldinho

 A falta de asuntos más transcendentales, tanto el presidente como su ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba – que estuvo especialmente bromista durante toda la mañana- emplearon parte del tiempo a hablar de fútbol.

Zapatero estaba feliz por el triunfo del Barça. “El gol de Ronaldinho fue magnífico”, manifestó con una amplia sonrisa. A escasos pasos se encontraba Pérez Rubalcaba, forofo madridista, quien desveló que cuando el equipo azulgrana marca un gol, Zapatero le manda un mensaje o le llama al móvil para ‘chincharle’.

Otra de las ‘noticias’ que ofreció el presidente es que estas Navidades se marchará unos días al Coto de Doñana a descansar con su familia. Será a partir del 23 de este mes ya que hasta entonces estará “muy ocupado”.

Larga conversación de Rajoy y Zaplana en un rincón de Palacio

Lástima que los fotógrafos estuvieran ‘vetados’ dentro del salón de Pasos Perdidos (aunque algunos móviles si se vieron funcionando), porque hubo escenas para inmortalizar durante la larga jornada. Por ejemplo, en un aparte buscando la soledad de las  miradas se pudo ver a Mariano Rajoy y a Eduardo Zaplana, hablando de sus cosas. ¿de qué asuntos debatirían?. Un enigma.

Y en otro corrillo el propio Zapatero, con tres de sus ministros. Montilla, Rubalcaba y Solbes…¡mientras vaya bien la Economía¡…fue lo único que algunos oídos agudos pudieron captar de la conversación que mantenían en privado. A ellos se sumó la titular de Sanidad Elena Salgado. O sea, “medio Consejo de Ministros", como bromearon algunos.

Gallardón y Blanco, aplausos y pitos

No estuvo demasiado concurrida la fiesta de la Constitución en el Congreso. Y a falta de presidentes autonómicos, como fue el caso de Esperanza Aguirre, acudieron 'otros' en su lugar como Alberto Ruíz Gallardón. El alcalde de Madrid llegó a la par con José Blanco, y cuando entraban en el hemiciclo se produjo una situación curiosa, pues los allí congregados -gente de la calle- les recibieron con pitos y aplausos por igual. El caso es que no quedó claro para quién era cada cosa...

Zapatero, "sangriento"

Eso es lo que le corearon al presidente del Gobierno las mismas gentes apostadas en la puerta del Congreso. Un recibimiento nada agradable y, por supuesto, muy poco tolerante en un día como en el de la Constitución.