Junta y personas con discapacidad abogan por una formación específica del asistente personal para potenciar su figura

La Junta de Castilla y León y las asociaciones de personas con discapacidad han abogado por una formación específica del asistente personal para potenciar esta figura y su contratación por parte de quienes lo necesiten para lograr una mayor autonomía personal y una más fácil inclusión social.   

Ésta es una de las cuestiones que se ha puesto de manifiesto durante la jornada 'Asistencia Personal: Una prestación para la autonomía de las personas con discapacidad', que organizado en Valladolid la Plataforma Representativa Estatal de Personas con Discapacidad Física (Predif) con el fin de analizar la evolución de la figura del asistente personal en España, la prestación de la asistencia personal dentro del Sistema de Atención a la Dependencia y las perspectivas y necesidades de las personas con dependencia respecto a la figura del asistente personal.   

A la inauguración de la jornada han asistido la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades de la Junta de Castilla y León, Milagros Marcos; el presidente de Cermi, Luis Cayo Pérez Bueno; y el presidente de Predif, Francisco Sardón Peláez.   

En este marco, tanto Cayo como Sardón han señalado la necesidad de potenciar la figura del asistente personal, una prestación a la que se recurre poco en España --del millón de prestaciones sólo supone el 0,5 por ciento-- pero que puede ayudar a una persona dependiente a "enfocar" cualquier área de su vida.  
 Sin embargo, Francisco Sardón ha señalado que hay algunas cosas que mejorar aún para que se fomente su utilización, lo primero una formación específica para estos profesionales, algo en lo que trabajan Cermi y Predif, y su regulación como código profesional, ya que actualmente se encuadra dentro de los empleados del hogar.   
Además, de esta forma se conseguiría establecer una "bolsa" de asistentes personales formados para atender necesidades específicas, con perfiles determinados, ya que se trata de una figura que debe ser de "mucha confianza" que ofrece servicios "personalísimos" y si no hay cierta "afinidad" o "simpatía" entre la persona dependiente y su asistente hay que estudiar su posible sustitución.

Escasa utilización   

Así lo ha señalado Cayo, quien considera que el asistente personal esta "infrarepresentado" en el catálogo de prestaciones y hay comunidades autónomas que ni siquiera lo contemplan, cuando es una figura de las más "idóneas" para la inclusión y la participación en la comunidad por parte de las personas dependientes.   

En este sentido, Francisco Sardón también considera que hay que dar a conocer más esta prestación y las posibilidades que ofrece, puesto que a su juicio no se ha publicitado bien ni por parte de las asociaciones ni por la Administración.   

Por su parte, la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades de Castilla y León, Milagros Marcos, también ha incidido en que el asistente personal es la figura que "mayor y mejor" respuesta da a la autonomía personal y la inclusión de las personas dependientes, motivo por el que ha recordado que desde hace dos años se trabaja con Predif y el Tercer Sector en esta materia.   
Marcos ha asegurado que en la Castilla y León se ha triplicado el número de asistentes personales y se ha alcanzado los 134 de 70.000 prestaciones concedidas --segunda comunidad que más tiene--, para lo que considera que ha sido "clave" el incremento en la financiación de la prestación, ya que se utilizan los mismos criterios que con las plazas residenciales, el usuario aporta en función de su capacidad económica.   

La consejera, quien ha lamentado que el asistente no se haya regulado antes a pesar de que la Ley de la Autonomía Personal y Atención a las personas dependientes lleva aprobada desde 2007, cree que hay que seguir trabajando en su definición, en concretar su formación específica y sus capacitaciones según las diferentes discapacidades. En concreto, cree que deberían recibir una formación genérica pero otra específica en función de si se trata de una discapacidad física, intelectual o por enfermedad mental, por ejemplo.   

La consejera ha explicado que este año se ha "pilotado" todo lo que se refiere al asistente personal en la Comunidad y ya hay suficiente información para "avanzar" en materia de formación, de manera que este año se pudiera cerrar este capítulo y definirla concretamente.   

De forma paralela, se trata de facilitar información a los asistente sociales y las corporaciones locales para que sepan la importancia de esta figura, que además supone un complemento también para las familias de las personas con discapacidad.