Para pocas celebraciones

La entrega de los Premios Castilla y León 2011 (este año sin dotación económica), el acto institucional del Día de la Comunidad, aunque siempre sea en vísperas, ha sorprendido. Y lo ha hecho porque las palabras del poeta palentino, José María Fernández Nieto, que hablaba en torno de los premiados, fueron emotivas, cercanas y sinceras, como corresponden a un escritor de 92 años con las dificultades de movilidad propias de la edad que, sin levantarse de la silla, se dirige con total humildad a un auditorio plagado de representantes institucionales para contar sus anécdotas y recuerdos.

Pero de la sencillez de este palentino de Mazariegos, con su realidad más humana, pasamos a la realidad más cruda del presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, que hizo un discurso duro y reivindicativo, describiendo la "crítica situación de la nación" y reivindicando el Estado autonómico. "Somos parte del problema pero también de la solución", volvió a repetir en una especie de eslogan que va camino de conseguir que sea coree.

El Cuarteto Ripalda de la Oscyl interpretó varias piezas para relajar de paso el ambiente cargado como estaba, tras las palabras de Herrera, de crisis, esfuerzos y sacrificios. Después, un poco de tertulia en el vestíbulo del Centro Cultural Miguel Delibes, tampoco demasiada, para finalizar un acto en el que el personal no estaba para demasiadas alegrías, pendientes más de los nuevos anuncios del Consejo de Ministros y de la falta de acuerdo para el manifiesto de Villalar que de las celebraciones.