La Infanta Cristina parece cada vez más implicada
jueves 12 de enero de 2012, 19:36h
Poco a poco, avanzamos en el "caso de la Infanta Cristina" y su relación con las empresas de su marido Urdangarín,
Noos y sus complementarias... Recordarán que la primera vez que desde
la residencia de la Zarzuela se comentó el Caso Urdangarín, y el jefe de
la Casa Real, Spottorno calificó de actividades no ejemplares las del
yerno, se le preguntó por las responsabilidades de su mujer, la Infanta
Cristina. Spottorno, y tras anunciar que Urgangarín quedaba
apartado de las actividades de la Casa Real, dijo entonces; sobre la
Infanta que "ya se vería"... Y poco a poco, el papel de doña Cristina ha
ido quedan más y más en entredicho, como corresponsable, y en todo caso
inevitablemente informadísima, de no pocas de esas actividades del
"yerno nada modélico". Hoy revela el diario El Mundo que la declaración
de la renta de 2006, incluida en el sumario, refleja las plusvalías por
lo desviado desde el Instituto Nóos, y en concreto, cuenta que la
Infanta Cristina ganó 571.000 euros en tres años con la promotora
familiar Aizoon tras haber invertido 379 veces menos, esto es, los 1.503
euros que costó la constitución de la sociedad, una empresa que pronto
se convirtió en una máquina de ganar dinero gracias a los contratos
públicos que el dique de Palma consiguió con la Generalitat valenciana,
3,5 millones, y del Gobierno balear, otros tres millones . Lo cuenta el
referido diario en sus titulares de portada: La infanta Cristina
invirtió en Aizoon 1.500 euros y ganó 571.00. El valor de patrimonio de
la hija menor del Rey en Aizoon, es decir, el 50 por 100 del valor de
esa empresa, es de 572.406 euros. Recuerda la información que la empresa
patrimonial fue empleada por el duque de Palma para desviarse fondos
públicos captados irregularmente por el instituto Noos, teóricamente
creado "sin ánimo de lucro" en sus estatutos. Más aún: según el nuevo
relato periodístico, la contabilidad de la promotora Aizoon, intervenida
por la Policía Judicial, revela continuas salidas de dinero de la
empresa a nombre de la Infanta Cristina. Con periodicidad casi semanal,
la copropietaria de la entidad registraba operaciones y reflejaba que
doña Cristina e Iñaki sacaban de la empresa de manera casi paralela
entre 500 y 600 euros. Unos 35.000 euros entre 2005 y 2010, se asegura. Y
se deduce que las cuentas de Aizoon reflejan que el matrimonio empleaba
los fondos desviados desde Noos para hacer frente a sus gastos
corrientes, y costeaban con esa cuenta las facturas de sus teléfonos
móviles, el alquiler de su flota de automóviles, la luz, el gas y
numerosas comidas en reputados restaurantes madrileños y barceloneses.
Destaca, por ejemplo, en este apartado de gastos, el pago de cinco mil
euros a una empresa de catering especializada en comida japonesa, o
6.500 euros en botellas de vino que iban a parar a la bodega del
domicilio conyugal, vivienda cuyo acondicionamiento también fue
sufragado con dinero procedente del Instituto Noos, por un importe que
se elevó a 3.000 euros. Y otra serie larga de gastos: carpas para
eventos, billetes de tren, compras de flores, entradas para espectáculos
y hasta pagos a empresas de guardamuebles y mudanzas...
Parece
evidente que la Infanta Cristina estaba perfectamente informada de los
fabulosos negocios que dirigía su esposo, y que les resultaban tan
pingües. De ahí que se insista en la sospecha de que la Casa del Rey ha
decidido alejar de sus actividades oficiales a la pareja del
conglomerado Noos, aunque esa situación esté originando, según cuentan,
no pocas tensiones en el seno de la familia del Rey. Los más recientes
semanarios "del corazón" abundan en esa clase de informaciones, e
insisten en que parece haber dos bloques: la Reina mantendría,
sorprendentemente, un cierto apoyo "moral" a Urdangarín y a su esposa,
la infanta Cristina, mientras, de la otra parte, el Príncipe don Felipe,
junto con el propio Rey, han valorado muy negativamente los efectos que
sobre la imagen de la Corona están teniendo las incesantes noticias
sobre el yerno y sus negocios, sin poder "salvar", tampoco, a doña
Cristina. El rostro serio y preocupado del Rey en las más recientes
apariciones públicas -mensaje navideño, Pascua Militar-, sería la mejor
demostración de esa viva preocupación que le embarga, y que reaviva cada
una de las crónicas y nuevos datos que contienen los medios
informativos. El antiguo balonmanista es hoy, muy a menudo, objeto de
broma y de escarnio a la primera familia del país. Y se hacen apuestas
sobre cuánto tiempo podrá aguantar Telefónica a tan indeseable personaje
como delegado en Washington... Pero la gran cuestión y la incógnita es
hasta dónde llegará la Administración de Justicia, aunque no parece
fácil que se puedan deslindar las actividades de Iñaki Urdangarín y de
su esposa, cuando ésta aparece permanentemente en todos los documentos
que, presuntamente, implican al yerno duque de Palma.