Herrera: "¿Qué diferencia hay entre este anuncio y los anteriores?

El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, ha realizado "una primera valoración", que necesariamente debe ser "provisional y breve", sobre el comunicado leído esta tarde por tres encapuchados de ETA, en el que la banda terrorista anuncia "el cese definitivo de su actividad armada".

"Siempre he creído que la derrota total de ETA se producirá gracias a la conjunción de algunos importantes factores" ha asegurado Herrera, quien ha citado "el reconocimiento de la superioridad moral de las víctimas, la firmeza de la sociedad española, la fortaleza de la Democracia y el Estado de Derecho, el esfuerzo, eficacia y sacrificio de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad, y el de los jueces y fiscales la plena colaboración internacional y por supuesto la unidad de los demócratas".

Asimismo, el presidente de la Junta ha querido hacer esta primera valoración y actuar de forma "prudente" y  esperar a conocer las reacciones del presidente del Gobierno y de los líderes de los dos partidos políticos más importantes de España.

Al respecto, Juan Vicente Herrera ha explicado que en sus declaraciones "han coincidido en expresar su satisfacción por la decisión de ETA de renunciar definitivamente a la violencia. Han hablado de una gran victoria de la Democracia. De corazón y razón quiero coincidir con ellos", informa ep.

"Pero también reconozco que me falta información para poder distinguir, en la retórica criminal de ETA, la posible diferencia que pueda existir entre este anuncio de cese definitivo de su actividad armada y sus anteriores anuncios de alto el fuego permanente o de tregua indefinida y sin condiciones, que todos recordamos con tanta amargura, dolor y frustración", ha continuado Juan Vicente Herrera.

En este sentido, el presidente de la Junta de Castilla y León ha aseverado que "salta a la vista" para cualquier observador "objetivo y sereno" que nada en el nuevo comunicado de ETA induce a pensar en su derrota, disolución, desmantelamiento, entrega de las armas, petición de perdón o asunción de responsabilidades" al tiempo que ha añadido que "el anuncio se acompaña y precede de una serie de objetivos y pretensiones políticos que desgraciadamente suenan a condiciones ya sabidas".

Por último, para Juan Vicente Herrera "este es el momento más oportuno para el recuerdo de las 829 víctimas mortales de ETA y de todas las víctimas del terrorismo", que en sus propias palabras "deben ser siempre el referente moral de nuestra Democracia".

"Pero en este punto concreto el nuevo comunicado de ETA alcanza la categoría de asco, tanto por su premeditado olvido de sus víctimas inocentes, como por su jactancia y recuerdo expreso de sus "caídos, presos y exiliados", ha aseverado Herrera.

"Ni siquiera equiparan a víctimas y verdugos. Olvidan a las primeras, y sacralizan a los segundos. El peor de los caminos", ha concluido el presidente de la Junta en su declaración.

"¡Por fin, hemos esperado cuarenta años esta noticia!"

El secretario del PSCL, Óscar López, ha recibido con entusiasmo el anuncio del fin definitivo de la lucha armada por parte de ETA, que ha calificado como "la noticia más importante de España en los últimos cuarenta años".

El máximo responsable de los socialistas castellanos y leoneses, que ha participado en el acto de presentación de los candidatos socialistas por la provincia de Valladolid al Congreso y Senado, ha sido especialmente gráfico al valorar el fin del terrorismo etarra: "!Por fin, por fin, hemos esperado cuarenta años esta noticia!"

Sin embargo, el político ha querido tener un recordatorio para todas las víctimas de la banda asesina, sus familiares y la sociedad española "que ha luchado contra el terrorismo y lo ha sufrido en carne propia", aunque tampoco se ha olvidado de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCSE), de los concejales del País Vasco, entre ellos compañeros socialistas, "que han dado su vida por defender la libertad", ni de la cooperación internacional y la lucha judicial y de los partidos políticos.

Alejo lo atribuye a la unidad de los demócratas

Por su parte, el delegado del Gobierno en Castilla y León, ha calificado de "buenísima" la noticia del cese de la actividad armada anunciado por ETA, y ha recordado que se debe "fundamentalmente" al trabajo de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y a la unidad de las fuerzas democráticas.

"Si han entregado las armas es porque lógicamente les hemos derrotado, y esto es lo que hay que celebrar hoy", ha manifestado Alejo, quien al mismo tiempo ha dedicado un recuerdo a "todas las personas --civiles, militares, e integrantes de los cuerpos de seguridad-- que durante todos estos años de terrorismo irracional de la banda han perdido la vida".

En cuanto al futuro que se abre tras el anuncio de la banda terrorista, Alejo señaló que "lo que pasará se irá viendo", y que lo "importante" es el comunicado. "A partir de ahora el país, las fuerzas democráticas y las instituciones sabrán lo que hay que hacer".

El capitán Aliste cree que la banda "sale vencedora"

El capitán Juan José Aliste, quien perdió las dos piernas en un atentado de ETA cometido en Salamanca en noviembre de 1995, ha asegurado que con el comunicado de la banda terrorista, ésta "sale vencedora" y ha recordado que la sociedad no puede "estar muy a gusto" con lo ocurrido.

Aliste ha reconocido que la decisión de ETA era "previsible" después de los últimos pasos como la Conferencia de Paz celebrada el pasado lunes en San Sebastián, la cual ha definido como un "paripé del mundo etarra" y una "continuación de la famosa hoja de ruta".

Este capitán de Infantería, natural de la localidad zamorana de Ribas de Aliste, ha subrayado que "todo el mundo desea que se acabe la violencia", pero ha avisado de que "el problema es si ETA acaba como vencedora o como vencida, y de momento lo hace como vencedora".

"Éste puede ser un momento para el fin de ETA tan bueno como cualquier otro", ha aseverado, a lo que ha añadido que los terroristas "ven que están en las instituciones y que el Gobierno está dispuesto a ceder en todo", de manera que ha augurado que "van a seguir pidiendo".

En cuanto a un posible diálogo con la banda, Juan José Aliste ha asegurado que "ya lo está habiendo", lo que, a su juicio, no se corresponde "con lo que quiere la sociedad", al tiempo que ha advertido de que "se están produciendo acercamientos de presos e indultos a etarras bajo cuerda".

Precisamente por ello, el capitán Aliste ha insistido en que los diferentes procesos que se desarrollan actualmente contra terroristas responden "a un acuerdo", puesto que "son condenados para ser indultados a continuación".

Las últimas víctimas

Los agentes de la Guardia Civil Diego Salvà y Carlos Sáenz de Tejada fueron las últimas víctimas mortales de ETA en España, después de que la banda terrorista colocara debajo de su vehículo una bomba lapa frente al cuartel de la Benemérita en la localidad mallorquina de Palmanova el 30 de julio de 2009.

Concretamente, Sáenz de Tejada tenía 28 años, había nacido en Burgos y era Guardia Civil en Palmanova. Había ingresado en el Cuerpo el 18 de febrero de 2008 y había llegado destinado a la isla hacía un año, el 19 de julio de 2008.

Por su parte, Salvá Lezaun tenía 27 años, había nacido en Pamplona y era alumno en prácticas. Había ingresado en el Cuerpo el 25 de agosto de 2008 y comenzó a trabajar en Mallorca, como alumno en prácticas, el 31 de enero de 2009.

La bomba lapa explotó minutos después de que lo dejara un brigada y lo cogieran los dos jóvenes agentes de la Benemérita con el fin de llevarlo a un garaje para una revisión de mantenimiento.

Asimismo, ETA había colocado otra bomba lapa en otro vehículo de la Guardia Civil que, finalmente, no explotó, dado que el coche estaba averiado y nadie se montó en él, por lo que el artefacto fue posteriormente desactivado por los Tedax. Diez días después de estos asesinatos, la banda terrorista colocó tres bombas de poca potencia en tres restaurantes de Palma, que no causaron víctimas mortales, ni heridos.

No obstante, Salvá y Sáenz de Tejada no fueron las últimas víctimas mortales de ETA, dado que el 16 de marzo de 2010, ETA mató en un tiroteo en Dammarie-les-Lyssuroeste, al suroeste de París, al gendarme francés Jean-Serge Nérin, de 52 años.