El presidente Néstor Kirchner recibió a Mauricio Macri en la Casa de Gobierno en una reunión en la que el jefe de gobierno electo se llevó la promesa de que el oficialismo avanzará en otorgarle más autonomía a la Ciudad. Lo anunció el jefe de Gobierno electo tras el encuentro con el Presidente en la Rosada. Para el líder del PRO, "esta reunión acelera los tiempos" para que la Ciudad tenga pronto una policía propia
En una conferencia de prensa posterior en la Casa Rosada, Macri calificó a la reunión de "cordial" y que la idea fue buscar "una senda constructiva de trabajo" para cuando el empresario asuma el poder porteño el 10 de diciembre.
Según Macri, el Presidente accedió a promover en el Congreso -donde el kirchnerismo tiene mayoría-, la derogación de la Ley Cafiero, que limita la autonomía de la Ciudad en el control de una policía propia, de la justicia, los puertos y el transporte.
"Kirchner dio apoyo para una derogación parcial de la ley antes del 15 de agosto. Lo primero es que tengamos la policía y posiblemente el puerto, en lo demás el Presidente pidió ir paso a paso", dijo Macri en la sala de conferencias de la Casa Rosada.
De la entrevista, que Macri había pedido por escrito apenas ganó el ballottage el domingo último, participaron además de Kirchner y Macri el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, y el ministro del Interior, Aníbal Fernández.
Para Macri, el encuentro de hoy -que duró más de una hora- "acelera los tiempos y compromete a todos en la modificación de la Ley Cafiero, sobre todo al Presidente -reclacó- que tiene mayoría propia en el Congreso".
"Fue una reunión muy positiva en la que se abrió una agenda de trabajo, hablamos de todos los temas, el traspaso de la Policía, de la Justicia, el posible manejo de los puertos, y todo aquello que vaya generando autonomía para la Ciudad", detalló Macri.
Macri explicó en otro orden que "el tema de los fondos que recibe la Ciudad se va a discutir cuando se plantee un a nueva ley de coparticipación federal".
Dijo además que el Presidente le entregó el proyecto oficial para la Autopista Ribereña y se explayó sobre su concepción sobre la seguridad en el distrito.
"El (por Kirchner) estuvo de acuerdo en que la Ciudad necesita su policía propia", sostuvo el jefe de gobierno electo, y añadió que la discusión ahora "sobre qué es tener policía propia, se abrirá a partir del 15 de agosto".
Según el líder de Pro, Kirchner se mostró partidario también de hacer obras en el sector vivienda y de trabajar directamente con el BID (Banco Interamericano de Desarrollo).
La disposición final de la basura y la posible designación de nuevos lugares para ese fin fue otro de los temas que se abordaron así como la cuestión del manejo del transporte público, que ahora maneja la Nación.
"El Presidente no entiende por qué el subte está a caballo entre la Nación y la Ciudad y estuvo de acuerdo en que se establezca un ente tripartito, con funcionarios técnicos alejados de la política".
El jefe de gobierno electo llegó puntual a la cita acompañado solo por su vocero Iván Pavlovsky y por el legislador de PRO Avelino Tamargo, aunque estos dos no ingresaron al despacho, pese a que desde el Gobierno no les habían impuesto restricciones a otros acompañantes.
Gabriela Michetti, la vicejefa electa, quien habría sido invitada a la reunión, no pudo asistir al parecer por padecer una gripe.
La reunión se distendió cuando el Presidente le preguntó a Macri por una eventual venta del jugador de Boca Juan Ramón Riquelme, a lo que el presidente de Boca respondió que el tema estaba "algo difícil".
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