Nada nuevo bajo el sol
Más lobbystas de los fondos buitre trabajaron para el gobierno de Estados Unidos
domingo 02 de noviembre de 2014, 12:42h
El caso de la dirigente de la American Task Force Argentina
(ATFA), Nancy Soderberg, denunciado por la presidenta Cristina Fernández de
Kirchner por trabajar para el gobierno de Estados Unidos y a la vez ejercer
presión de lobby contra la Argentina, es tan sólo un ejemplo de una larga lista
de funcionarios estadounidenses que ejercen esa doble función, según publicó
hoy el diario Tiempo Argentino.
El titular del fondo buitre Elliott Management, Paul Singer,
ha invertido una gran cantidad de recursos para ejercer presión y mantener sus
influencias no sólo en el Congreso norteamericano sino también en la Casa
Blanca, los Departamentos de Estado, del Tesoro y la Justicia.
Así lo revela una nota periodística publicada en el
matutino, en la que señala que Singer "ha contratado directa o indirectamente a
un ejército de lobbystas que ha costado 1.830.000 de dólares en 2014 y
8.420.000 en lo que va del conflicto con la Argentina", en base a datos del
Congreso de los Estados Unidos.
Esa lista la integran, entre otros, Robert Shapiro, Brian
Gunderson, Robert Raben, Connie Mack IV, Gene De Santis, John Scofield, Jeffrey
Schockey y Mike Ference.
Shapiro, además de ser otro director de ATFA, "también tiene
múltiples interacciones con el sector público" estadounidense.
"Cumplió funciones como principal asesor económico en las
campañas de Bill Clinton, Al Gore y John Kerry", añade la nota.
Destaca que "Shapiro fue vicesecretario de Comercio para los
Asuntos Económicos, encargándose de todas las áreas estadísticas del gobierno".
En tanto Gunderson fue jefe de staff entre 2005 y 2009 en el
Departamento de Estado designado por la entonces jefa del Departamento
Condoleeza Rice y ahora como titular de su empresa GPC Associates cobró
directamente de Elliot Management 120.000 dólares solo este año.
Raben, conocido como "el asesor de Obama de los derechos
gays", cobró de la ATFA 280.000 dólares en 2014, mientras que el ex diputado
republicano Connie Mack IV se sumó a la compañía Liberty Partners Group,
cobrando por sus servicios 240.000 dólares este año.
De Santis, quien reporta directamente también Elliot, tiene
más de 30 años en experiencias legislativas y ha cobrado 30.000 dólares en lo
que va del año.
Finalmente, la American Task Force Argentina "destinó
100.000 dólares más para un grupo de lobby llamado Shockey Scofield Solutions,
integrado por John Cofield, Jeffrey Shockey y Mike Ference, todos con reciente
actividad en la banca republicana del Congreso".