Francisco y un llamado desesperado
"No más guerra. Es hora de detenerse. Deténganse, por favor, se lo pido con el corazón" pidió el Papa
domingo 27 de julio de 2014, 12:35h
El Papa Francisco realizó un llamado para que las sociedades
y las autoridades de Ucrania, Medio Oriente e Irak detengan la guerra, y
dialoguen con valentía para alcanzar la paz.
"No más guerra. Es hora de detenerse. Deténganse, por
favor, se lo pido con el corazón, deténganse", insistió el pontífice,
durante el discurso que realizó posterior al rezo del Ángelus, según reproduce
la agencia EFE.
El obispo de Roma recordó ante los miles de fieles
congregados en la Plaza de San Pedro del Vaticano que mañana se cumple el
centenario del estallido de la Primera Guerra Mundial.
Desde la ventana de su Palacio Apostólico, se refirió a este
hecho como un "trágico evento" que, dijo, es preciso recordar para
tener presente "las lecciones de la historia, haciendo que prevalezca
siempre la paz mediante un diálogo paciente y valiente".
En este sentido, el Papa Francisco dirigió unas palabras a las
personas que viven en Ucrania, Irak y Medio Oriente, tres zonas sumidas en este
momento en conflictos armados.
"Os pido que os unáis en mi plegaria para que el Señor
conceda a las poblaciones y a las autoridades de estas zonas la sabiduría y la
fuerza necesaria para alcanzar con determinación el camino de la paz,
afrontando cualquier disputa con la tenacidad del diálogo y de la negociación,
con la fuerza de la reconciliación", urgió.
Y añadió: "Que en el centro de cada decisión, no se
ponga el interés particular, sino el bien común y el respeto de cada persona.
Recordemos que todo se pierde con la guerra y nada se pierde con la paz".
Francisco hizo alusión al dolor de las personas que viven en
guerra y puso su atención, especialmente, en los niños.
"Pienso sobre todo en los niños a los que se les quita
la esperanza de tener un futuro. Niños muertos, heridos, mutilados, huérfanos,
que tienen por juguete los restos bélicos", expresó.
El máximo representante de la Iglesia católica terminó su
discurso con una sola palabra: "deténganse".
Después, saludó a los fieles católicos congregados en la
plaza vaticana y citó a los cristianos pertenecientes a las diócesis de
Cartagena, Madrid y Asidonia-Jerez.