Cumbre de presidentes
"La integración no debe ser tema de agenda sino una política de Estado" pidió Cristina en la CELAC
miércoles 29 de enero de 2014, 02:39h
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner afirmó en La
Habana, Cuba, que "la integración no debe ser solo un problema de agenda
sino una política de Estado de los países", al tiempo que remarcó que
"para eliminar la desigualdad se deben generar puestos de trabajo".
Al hablar ante el plenario de la II Cumbre de países de
América Latina y del Caribe (Celac), Cristina dijo que la integración entre los
países miembro "se debe dar no solo a nivel político, sino también a nivel
comercial, tecnológico e inmigratorio" y elogió a los inmigrantes de otros
países de la región que viven en la Argentina "porque hacen el trabajo que
por ahí algunos argentinos no quieren hacer".
"Hoy es un día histórico y no es un día
cualquiera", apuntó la Presidenta, y destacó que "trabajar sobre la
integración es una muy buena idea y creo que debemos comenzar a hacerlo porque
el tiempo se agota y las necesidades aumentan".
En ese marco, la jefa de Estado afirmó que "luchar
contra la desigualdad implica generar puestos de trabajo y no permitir que nuestras
exportaciones se sigan reprimarizando".
Además, sostuvo que "debemos hacer un acuerdo donde los
procesos de integración se pudieran dar en la región, para que los países
puedan aprovechar las oportunidades y generar puestos de trabajo".
Cristina, en ese sentido, consideró que "si no hay trabajo
es imposible reducir la brecha de desigualdad" en la región y para solucionar
ese flagelo aseguró que "no hay otro camino que generar valor agregado, ya que
eso genera empleo".
En su discurso en la reunión plenaria del foro regional,
reiteró también que uno de los desafíos es "transformar las economías de
producción primaria".
"Cuando me hablan del futuro y no se ocupan de los
jóvenes desocupados, es un gran cinismo" señaló la Presidenta al mencionar
el programa Progresar, de respaldo a los jóvenes de entre 18 y 24 años.
En otro tramo de su exposición, la jefa de Estado afirmó que
a la región latinoamericana y caribeña "nos conviene utilizar nuestro mercado
interno de 600 millones habitantes y debemos transformar nuestras materias
primarias para aportarles valor agregado".
La mandataria analizó que si la región no le agrega valor a
sus materias primas "vamos a estar construyendo una segunda dependencia,
que será mucho más profunda y estructural como es la tecnológica".
"Muchas de las riquezas que están en nuestros países
son imprescindibles para otros bloques", remarcó Cristina.
En esa línea, subrayó que "necesitamos que nuestro
potencial alimentario no salga solo en cajones, necesitamos agregarle valor, debemos
industrializar la ruralidad, que tenga valor agregado".
Asimismo, Cristina también agradeció "el respaldo del
plenario en la cuestión Malvinas", como lo había hecho anteriormente ese foro y
otros como la Unasur y el Mercosur, entre otros.
"Somos firmantes del Tratado Tlatelolco de no proliferación
nuclear", dijo la Presidenta y agregó que "Argentina es un país con
mucha tradición en materia de producción atómica, somos proveedores en este
sentido y podemos hablar de paz, pese a que tenemos una alta capacidad en este
sentido".
"Por eso valoro el apoyo contra el colonialismo e insto
al Reino Unido a que cumpla con las resoluciones de la ONU que le piden que se
siente a negociar la soberanía de las islas Malvinas", señaló Cristina y
subrayó que "es condición para el desarrollo mantener la desmilitarización
en esta zona de paz".
"Si alguien nos hubiera dicho diez años atrás que toda
la región se iba a reunir en Cuba en un proceso de integración sin precedentes,
nos hubieran tratado de utópicos", sostuvo, e insistió: "No estamos
reunidos en cualquier lugar, estamos en La Habana".
Fernández abogó por elaborar una agenda "que deje de
lado la burocracia" y que no convierta a la Celac "en un organismo
multilateral de los que tantos hay, con declaraciones que nunca se
cumplen".
Cristina valoró también este "proceso de integración
sin precedentes, porque ni siquiera lo logramos en la lucha por la
independencia".
La Primera Mandataria sostuvo que el proceso de integración
"deberá necesariamente darse porque el mundo está marchando claramente hacia la
conformación de bloques".
"El Siglo XXI se va a caracterizar por la conformación de
bloques, y esto debemos advertirlo", teniendo en cuenta además, afirmó, que los
países miembros forman parte de una "región particularmente favorecida" en
materia de recursos naturales, reservas de hidrocarburos y producción
alimentaria.
No obstante, acotó, "subyace en la región el problema de la
desigualdad, de la injusticia, que presupone la brecha entre los que más tienen
y los que menos tienen".
"El primer desafío que tiene la Celac -dijo- es el de
construir una agenda que deje de lado la burocracia y que no nos convierta en
un organismo multilateral de los tantos que hay, con declaraciones que nunca se
cumplen y creo que la primer cuestión a considerar es que debemos considerar
que todos los que estamos sentados acá, más allá de las diferencias políticas,
de volúmenes de economía, que todos somos iguales para cumplir las mismas
obligaciones y tener las mismas responsabilidades".
Señaló que es "un desafío construir una agenda en la cual
todos tengamos igualdad de condiciones en la toma y adopción de decisiones, que
es como nos hemos manejado en la Unasur, donde nos tocó destrabar conflictos
que parecían insolubles y superar momentos difíciles que logramos superar".
La presidenta habló ante el plenario de la II Cumbre de la
Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños como parte de su agenda
oficial en La Habana, donde además mantuvo reuniones bilaterales con sus pares
de Uruguay, José Mujica, de Venezuela Nicolás Maduro y de México, Enrique Peña
Nieto.