Lo confirmó Capitanich
Identificaron maniobras en distintas empresas que no respetan acuerdos de precios
jueves 19 de diciembre de 2013, 09:28h
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, dijo que
"estamos trabajando para concreción del acuerdo de precios, el próximo
viernes, y hemos identificado maniobras en distintas empresas" que no
respetan los valores acordados.
En la conferencia que dio en Casa de Gobierno, el jefe de
ministros mencionó como ejemplo lo que ocurre con la leche, la lavandina y la
yerba mate.
"Lo que hacemos (en esos casos) es fustigar duramente a
los que no respetan los acuerdos", dijo, y agregó que "cuando una
empresa toma una leche y le transfiere una calidad distinta y además aumenta el
precio, está claramente incumpliendo el acuerdo y engañando a los
consumidores".
Capitanich dijo que en caso de sanciones, están previstas
"las que corresponden para los que han infringido la ley".
Revelan más maniobras de grandes empresas contra los
consumidores
Las organizaciones sociales que llevaron a cabo distintos
relevamientos desde la implementación de los acuerdos de precios firmados por
el Gobierno con empresas detectaron más casos de maniobras de marcas
reconocidas, que en algunos casos implicaron una aceleración de precios de
hasta un 71 por ciento en el último mes, tan sólo por la proximidad de las
fiestas.
Asimismo, se produjeron situaciones de desabastecimiento en
distintas provincias; se observaron dispersiones de hasta 200 por ciento en los
precios del mismo producto en la misma cadena de supermercados, y se detectaron
engaños a los inspectores.
El monitoreo que se realizó en todo el país a través de la
campaña nacional "Mirar para Cuidar" -que llevaron adelante
militantes y voluntarios en todo el país- permitió identificar distintas
maniobra de empresas, para evadir el cumplimiento del acuerdo de precios
alcanzado con el Gobierno.
Según los últimos informes que llegaron desde las distintas
provincias, se observó también que muchos supermercados no exhibían en góndola
los productos acordados, creando una situación de desabastecimiento en
Corrientes, Mendoza y Salta, en productos de primera necesidad, como
detergente, leche chocolatata Cindor, Yerba Mate Taragüí, alimento para perros
y azúcar, entre otros.
Los inspectores designados lograron detectar además que en
muchos casos las reposiciones se efectuaban al momento de la inspección, o que
la remarcación de precios venía inmediatamente después de que se retiraban del
establecimiento.
Además se encontraron con situaciones insólitas como la
advertencia de personal de los supermercados "disfrazados" de
consumidores, encargados de seguirle los pasos a los inspectores.
Otra irregularidad fue la detección de precios muy dispares
entre distintos supermercados cercanos, para el mismo producto, además de los
aumentos injustificados desde el punto de vista económico.
En Capital Federal, el café la Morenita, por ejemplo, puede
encontrarse a $18,45 en Carrefour, y a $15,45 en Disco. En un escalón medio de
precios se ubican Coto, Jumbo, Vea, Walmart, y Día, todos exhibiendo precios
diferentes, pese a ser establecimientos vecinos.
Lo mismo sucede con el jugo Cepita, que en un supermercado
como Día cuesta $4,59, mientras que en Vea, sale casi el triple, $15,59,
siempre tratándose de supermercados aledaños.
También la dispersión de precios se dio en el interior de
las cadenas de los mismos supermercados, donde el kilo de cebolla blanca puede
encontrarse en las góndolas con una dispersión de hasta 188 por ciento entre el
establecimiento ´Día´ de Avenida Directorio ($4,99), y el ´Día´ ubicado en la
calle Iriarte ($14,39), de la Ciudad de Buenos Aires.
En tanto, el detergente líquido Ala puede encontrarse a
$6,99 en el ´Vea´ de la avenida Acoyte, mientras que en el ´Vea´ ubicado en la
calle San Juan el precio del mismo producto es un 17 por ciento mayor, a $8,19.
El dulce de leche en el `Walmart` de Cabildo se consigue a
$13,50, mientras que en la sucursal ubicada en la avenida Honorio Pueyrredón, a
$8,35, marcando el primero una diferencia de 55% más caro respecto del segundo.
Por otra parte, el kilo de banana observa una disparidad de
precios de hasta casi el doble en los Coto de distintos lugares de la Capital,
entre tantos otros ejemplos.
Tampoco faltó en los relevamientos la detección de las
falsas ofertas navideñas, donde se exhibe el cartel "oferta" para
tallarines Terrabusi, a $8,09, cuando en realidad lo que se produjo fue un
aumento en el precio de 3,9 por ciento a nivel mensual, desde octubre (los mismos
tallarines costaban $7,49 en octubre).
Idéntica "oferta" navideña se registró con la
yerba mate CBSe de Guaraná con un precio de $24,39 exhibido en diciembre, pero
que en realidad tuvo un incremento de 13,3% mensual desde octubre.
Estas estrategias se suman a las conocidas el miércoles, de
que las empresas lanzaron productos casi idénticos acordados con el Gobierno,
argumentando alguna diferencia de calidad indistinguible a los ojos de los
consumidores, y por las que firmas como Mastellone, con sus productos La Serenísima,
las marcas Ayudín, y Cindor aumentaron los precios de manera exorbitante e
injustificada desde todo punto de vista, con subas de hasta un 300% desde la
vigencia del acuerdo hace seis meses.
Más subas injustificadas recientes se vieron en el queso
rallado, que tuvo una suba mensual de 71%, de noviembre a diciembre; las
galletitas Mayco y las Cerealitas, una suba de 45%, en el mismo período; las
hamburgueses congeladas Swift, un incremento de 24%; y el puré de tomate la
Campagnola de 520 gramos, subió 21,2% en un mes.
Télam accedió además a una encuesta cualitativa efectuada a
los inspectores que colaboraron en los operativos, donde se detectó que en
Caballito, los códigos de barra de los productos en la góndola no son los
mismos que tienen los cajeros a la hora de registrar la compra, con una
diferencia siempre perjudicial al consumidor.
En tanto que en San Isidro se observó que muchos productos
estaban señalizados como integrantes de la lista de acuerdos de precios, pero
con importes mayores a los acordados.
En Palermo, por caso, se detectaron carteles en góndolas que
decían "sin stock", a pesar de que no existía desabastecimiento del
producto.
La encuesta realizada a quienes participaron de los
relevamientos también reveló distintas estrategias para "disuadir a los
inspectores a retirarse del establecimiento sin terminar de cumplimentar su
tarea", como pasar por su camino el lampazo en plena tarea de control; e
indicaron la detección de movimientos de manera exprés para reponer mercadería
al momento de la inspección.
Ayer, fuentes del Ministerio de Economía adelantaron que el
nuevo acuerdo de precios para 187 productos que se encuentra en ciernes irá
acompañado de una política de "administración de precios", distinta
al "congelamiento de precios".
Esto es, a las empresas que incumplan los acuerdos o
realicen "avivadas" en el resto de los 10.000 productos monitoreados
en supermercados y en toda la cadena de proveedores, se les aplicarán las
"distintas figuras legales disponibles tendientes a corregir esos
desvíos".
Algunas de esas alternativas son "la denuncia por abuso de
posición dominante", la aplicación de la Ley de Defensa del Consumidor, la
fiscalización a través de la AFIP para detectar irregularidades en los precios
y los balances de las compañías, y la quita de beneficios otorgados por el
Estado, entre otras alternativas.
Con esta política, el Gobierno busca incitar a una dinámica
de intercambio permanente con el sector privado, que le permita a éste último
obtener "márgenes razonables de rentabilidad" sin perjudicar al
consumidor.
De manera que si la firma o el sector necesita subir los
precios, acuda a la secretaría de Comercio para analizar la necesidad real de
realizar tal acción, que será avalada en los casos que se justifiquen
económicamente.