¿Para quién habrá sido el mensaje?
El Papa afirmó que "alimentos que se tiran a la basura se roban de la mesa del pobre"
miércoles 05 de junio de 2013, 15:50h
"Los alimentos
que se tiran a la basura son alimentos que se roban de la mesa del pobre, del
que tiene hambre", ha dicho el Papa Francisco para condenar la
"cultura del desperdicio" y animar a promover una "cultura de la
solidaridad" que respete el medio ambiente, durante su catequesis semanal
en la Plaza de San Pedro.
El Pontífice ha
recordado que este miércoles se celebra el Día Mundial del Medioambiente, que
invita "a contrarrestar el desperdicio de alimentos y a mejorar su
distribución en el mundo". "Dios confió al hombre y a la mujer el
cultivo y cuidado de la tierra, para que todos pudieran habitar en ella, pero
el egoísmo y la cultura del desperdicio han conducido a desechar a las personas
más débiles y necesitadas", ha dicho, aunque seguidores del kirchnerismo
rápidamente aprovecharon estos dichos para vincularlos a la actitud que
tuvieron los integrantes de la Mesa de Enlace, cuando en medio del conflicto
entre un sector del campo y el gobierno, los ruralistas se jactaron tirando
miles de litros de leche al costado de la ruta.
En esta línea, el
Pontífice ha precisado que "más aún, en muchas partes del mundo, pese al
hambre y la desnutrición existentes, se desechan los alimentos".
Asimismo, Francisco
ha recordado el relato evangélico de la multiplicación de los panes en el que
"Jesús da de comer a la multitud con cinco panes y dos peces, y ha
apuntado que "cuando la comida se comparte de modo justo, nadie carece de
lo necesario" ya que "la ecología humana y la ecología medioambiental
son inseparables".
Además, el Papa ha
asegurado que el hombre no cuida el medioambiente y que esta crisis ambiental,
del hombre, es una crisis de la persona, "la persona hoy está en
peligro". Igualmente, ha reiterado que "la causa del problema no es
superficial", no es "sólo económica sino ética y antropológica"
porque "el dinero manda", por lo que ha animado a "cuidar la
tierra no el dinero".
En su saludo a los
peregrinos de lengua española se ha detenido en particular a los grupos
provenientes de España, Colombia, Uruguay, Argentina, México y los demás países
latinoamericanos y les ha invitado a "respetar y cuidar la creación, a
prestar atención y cuidado a todos y a contrarrestar "la cultura del
desperdicio" y del desecho para promover una cultura de la solidaridad y
del encuentro".