Con que sí estaba harto de los derechos humanos el periodista
Vergez, el convicto capitán retirado que trabajó para Lanata
sábado 19 de enero de 2013, 22:58h
El convicto capitán retirado, quien cumple condena de
prisión por delitos de lesa humanidad, reveló que trabajó para el periodista
realizando "investigaciones e incluso algún reportaje bastante liviano que me
pedía".
Durante una entrevista exclusiva concedida a Télam en el
penal de máxima seguridad de Marcos Paz, donde habló de distintos temas, el
represor, que se encuentra purgando una condena de 23 años de cárcel por el
secuestro y desaparición de Javier Coccoz y Julio Gallego Soto, y por el
secuestro de la esposa del primero, Cristina Zamponi, contó algunos detalles de
su relación con el mundo periodístico.
Vergez dijo que en los años noventa, después de publicar el
libro 'Soy Vargas' (uno de los alias que utilizaba para cometer sus tropelías)
fue convocado por el periodista Jorge Lanata.
"Trabajé directamente para Lanata, que me llamaba por
teléfono para pedirme investigaciones e incluso algún reportaje bastante
liviano", relató, y luego detalló que "lo que más le interesó fue una
investigación que hice sobre un director de ATC que en su momento había puesto
Menem, uno flaco alto, pero ahora mismo no recuerdo su nombre", refiriéndose
probablemente a Horacio Frega, presidente de la emisora a fines de esa década,
con quien Lanata tuvo varios entredichos en aquel entonces.
El capitán retirado, reconoció un poco molesto que el actual
conductor estrella del Grupo Clarín lo mantenía "oculto" y que nunca blanqueó
la relación que mantenían. En cambio, se refirió cariñosamente a otra figura
del periodismo, Samuel Gelblung, para el que también trabajó.
"Chiche fue más noble que Lanata, porque me tenía como
panelista" en su programa de TV de aquellos años, recordó.
En otro pasaje de la entrevista, Vergez contó como fueron
los entretelones de la venta de los archivos del Batallón 601 de Inteligencia
del Ejército, supuestamente adquiridos por el ex presidente Carlos Saúl Menem
durante su segundo mandado, en 250.000 dólares.
"La negociación, que estuvo a cargo de (Juan Bautista)
'Tata' Yofre y Fabián Doman, terminó bien", reveló, volviendo sobre sus
conocimientos sobre las actividades "poco conocidas" de algunos periodistas.
"Menem le pagó 250.000 dólares a (el general de brigada
retirado Jorge Ezequiel) Suárez Nelson. Podés preguntárselo al propio Menem.
Decile que yo te lo dije", le dijo Vergez a Télam.
Suárez Nelson, a quien Vergez señaló como quien fuera su
jefe directo en la inteligencia militar y que llegó a jefe del referido Batallón
de Inteligencia 601 (con sede en un hoy abandonado edificio de la avenida
Callao y Viamonte) falleció el 17 de octubre de 2008.
Vergez, está acusado de ser un asesino serial (de las
familias Pujadas y Vaca Narvaja, de estudiantes bolivianos, etc.) antes y
después del golpe de estado cívico-militar de marzo de 1976.
Antes del golpe, fue uno de los fundadores y jefes del
"Comando Libertadores de América", versión cordobesa de la Triple A. Después
del 24 de marzo fue jefe del campo de concentración y exterminio "La Perla", en
las afueras de la ciudad de Córdoba.
Por lo primero todavía no fue juzgado, y está siéndolo por
lo segundo, pero ya ha sido condenado a 23 años de prisión perpetua por
crímenes de lesa humanidad cometidos posteriormente en área del Primer Cuerpo
de Ejército y particularmente por lo que la inteligencia militar denominó
"Operativo Redondo".
Fue a partir de este juicio, recientemente concluido, que
surgió el interés por los esfumados archivos de la inteligencia militar,
archivos que contienen, entre otras cosas, los dichos de centenares sino miles
de detenidos-desaparecidos, por lo general obtenidos bajo tortura.
El interés en los mencionados archivos surgió, más
precisamente, por la aparición de las transcripciones de los supuestos
interrogatorios hechos por la inteligencia del Ejército al contador Julio
Gallego Soto -quien había sido un estrecho colaborador de Juan Perón- y a
Rafael Perrota, director del diario "El Cronista". Ambos permanecen
desaparecidos.
Vergez, que fue condenado por el secuestro de Gallego Soto y
por el del jefe interino de la inteligencia del ERP (Ejército Revolucionario
del Pueblo) Javier Coccoz, también desaparecido, a 23 años de prisión, negó
haberlos asesinado y señaló a sus presuntos victimarios (ver recuadro).
Finalmente, consultado sobre si siente algún tipo de
arrepentimiento, afirmó "soy militar, nos prepararon para matar. En una guerra
se mata y se muere. Cuando matás al primero es un shock. Después es menos
duro", concluyó.