El hallazgo de estas fallas constituye un paso importante para el tratamiento del cáncer, difundió este jueves Prensa Latina.
'Hay un patrón repetitivo, lo cual indica que el repertorio de genes involucrados en cáncer es finito y compartido entre los distintos tumores', indicó Josep Baselga, director del Instituto de Oncología de Vall d'Hebron.
Para los científicos, este gran tronco común resulta sorprendente, aunque se conocía de alteraciones que se repetían en diferentes tipos de tumores.
Sin embargo, la gran cantidad de casos estudiados de diferentes países permite tener una visión más amplia y clara de la enfermedad.
Pese a esta gran cantidad de genes que comparten los tumores, existen genes particulares que contribuyen al desarrollo del cáncer.
Aunque en 75% de los 26 casos analizados existen alteraciones comunes, 25% de las fallas genéticas son específicas.
En el estudio fueron caracterizadas más de 122 nuevas áreas del genoma con fallas genéticas claves para el conocimiento de los mecanismos moleculares del cáncer.
'Sólo conocemos los genes implicados en el cáncer en 25% de las alteraciones detectadas. Nos queda 75% por descubrir; y las zonas con genes por descubrir darán lugar a nuevos proyectos de investigación', indicaron los investigadores.
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