Un grito que estaba atragantado hace 24 años
Todo el país salió a calles a festejar
jueves 10 de julio de 2014, 09:13h
Más de 50.000 personas festejaron en el Obelisco, epicentro
de la alegría porteña, y en otras ciudades argentinas por la clasificación de
la selección a la final del Mundial, después de 24 años.
Los hinchas, sin distinción de sexo, edad y condición
social, le dieron un tono blanquiceleste a la Plaza de la República, que se
convirtió en el polo de convocatoria apenas terminados los 120 minutos de juego y la serie de penales.
El festejo se extendió por la avenida Corrientes hasta
Callao y por la avenida 9 de Julio y la Diagonal Norte, en el día patrio, hasta
Plaza de Mayo, un lugar emblemático de los festejos populares, en una caravana
constante de automóviles que tocaban sus bocinas.
En tanto, los simpatizantes de a pie, mayoría con camisetas
y gorros argentinos, agitaban banderas blanquicelestes y hacían sonar cornetas.
Pero el festejo no se circunscribió a las plazas principales
y abarcaron otros puntos clave de la ciudad de Buenos Aires como avenida
Pueyrredón y Santa Fe o Acoyte y Rivadavia.
Y así como el seleccionado nacional es la representación de
todo el fútbol argentino, el sentimiento de la gente abarcó todo lo largo y lo
ancho del país.
En Mendoza, miles de hinchas cubrieron el microcentro de la
capital y distintos puntos del interior de la provincia, tal como sucedió en
los Mundiales de 1978 y 1986, y en la victoria sobre Brasil en 1990.
La intersección de la avenida San Martín con Garibaldi y
Paseo Sarmiento fue el punto principal de reunión de la gente que llegó de
departamentos vecinos como Las Heras, Guaymallén y Godoy Cruz, mezclados con
turistas de provincias como Buenos Aires, Salta, Córdoba y San Luis, que están
de vacaciones.
En el departamento Maipú, 15 kilómetros al sureste de
Mendoza capital, de donde es oriundo el volante Enzo Pérez, la gente salió a
festejar a la plaza departamental, y también hubo festejos en las ciudades de
General Alvear, San Rafael y Malargüe.
En La Plata la alegría de los hinchas se hizo notar fuerte
en la céntrica Plaza Moreno y en las intersecciones de las calles 7 y 50,
lugares típicos de las tradicionales celebraciones populares.
Miles de hinchas con camisetas y gorros celeste y blancos y
portando banderas se convocaron a la plaza, ubicada en el centro geográfico de
la ciudad, justo en frente del Palacio Municipal y de la Catedral de la capital
bonaerense.
En Córdoba, las calles de la capital se tiñeron de celeste y
blanco con epicentro en la intersección de avenida Vélez Sarfield y Boulevard
San Juan, frente al shopping Patio Olmos. El festejo se prolongó a todo el
interior provincial, especialmente en las ciudades de Villa María, Río Cuarto y
San Francisco.
En Bahía Blanca, banderas, camisetas, rostros pintados,
cornetas y bocinazos fueron el collage del festejo, que como es habitual
tuvieron como punto de reunión el Teatro Municipal, en la intersección de Alem
y Alsina, en el centro de la ciudad, y a la plaza Rivadavia, frente al Palacio
Municipal.
En Resistencia, la siesta provinciana se adueñó de la tarde
hasta cerca de las 17 y tras el penal convertido por Maxi Rodríguez se armó una
fiesta en las principales calles de la capital chaqueña.
En San Fernando del Valle de Catamarca, la capital provincial,
el frío (8 grados) no detuvo a miles de vecinos con camisetas argentinas y a
los jóvenes con sus caras pintadas de azul y blanco que se concentraron en la
Plaza 25 de Mayo, en pleno centro de la ciudad, frente a la Casa de Gobierno y
a la Catedral.
En Tucumán, cuna de la Independencia, miles de personas
salieron a festejar en caravanas de
autos y motos, y el punto de encuentro fue la plaza Independencia, desbordada
por la multitud. La algarabía se extendió a toda la provincia, donde los
tucumanos festejaron con mucho cotillón, banderas y bombas de estruendo.
En San Luis, miles de hinchas festejaron en toda la
provincia, eligiendo como epicentro la Plaza Pringles de la capital puntana,
frente a la Iglesia Catedral.
Y en San Salvador de Jujuy los lugares preferidos fue la
Plaza Belgrano, frente a Casa de Gobierno, celebración que se replicó en
ciudades como La Quiaca, límite fronterizo, Libertador General San Martín, San
Pedro, Palpalá, Perico y El Carmen.