Se les "va" el socio más importante
El Reino Unido decepcionado con Estados Unidos por apoyar el diálogo por la soberanía de las Malvinas
jueves 03 de abril de 2014, 13:49h
El Parlamento británico manifestó estar
"decepcionado" con Estados Unidos por apoyar el diálogo con Argentina
en la Cuestión Malvinas, pese a que el Reino Unido "le permite a
Washington tener bases militares" en sus dependencias.
El Comité de Asuntos Exteriores presentó un informe
donde detalló aspectos comerciales y políticos de la "relación
especial" que tienen con el gobierno de Barack Obama, con un párrafo
titulado "Caso de estudio: las Falklands (sic)".
El órgano legislativo, compuesto por cinco representantes
del Partido Conservador, cinco Laboristas y un Liberal Demócrata, recordó que
Estados Unidos "no toma posición en los reclamos de soberanía de las
islas".
También ha dicho constantemente que apoya las negociaciones
ente el Reino Unido y Argentina para resolver el tema", agregó.
Explicó que pese a que la Cancillería británica planteó la
disputa "en los más altos niveles", el gobierno estadounidense no
modificó su postura y, al igual que el resto de la comunidad internacional, no
reconoció la legitimidad del referendo realizado en las islas el año pasado.
Los parlamentarios concluyeron que la posición de Washington
es "decepcionante" y citaron al ex embajador británico en esa ciudad
Nigel Sheinwald, quien reconoció que la situación "es incómoda y no es lo
que queremos".
El informe recogió el testimonio de James Boys, profesor de
Estudios de Política Internacional de la Universidad de Richmond (Londres), que
pidió tener en cuenta que la Cuestión Malvinas "no es lo suficientemente
importante para el Reino Unido ni para los Estados Unidos como para causar un
deterioro importante de las relaciones".
No obstante, el comité de la Cámara de los Comunes, con un
extraño argumento, criticó que Obama sostenga su postura pese a que "el
Reino Unido le permite usar otros dos Territorios de Ultramar, Ascensión y
Diego García, como bases militares".
La mención de esa última isla, ubicada en el Océano Índico,
contradice la propia posición británica en el Atlántico Sur ya que para
alquilarle el territorio a Estados Unidos, en la década del 60 tuvo que
expulsar a los 2 mil habitantes originarios, los chagosianos, a quienes hasta
hoy no se les reconoce su derecho de autodeterminación.
Este pueblo, que a diferencia de los habitantes de Malvinas
sí son una población nativa diferente a la metrópoli conquistadora, mantiene la
lucha por volver a su hogar, mientras que el Reino Unido se lo niega una y otra
vez en distintos tribunales, como ocurrió esta semana en la Cámara de
Apelaciones de Londres.
La cesión de la isla por medio siglo a Washington termina en
2016, pero el gobierno británico tiene todas las intenciones de renovar el
contrato.
"Es grato tener la presencia de Estados Unidos en Diego
García y queremos que continúe", dijo Mark Simmonds, funcionario del
Foreign Office, ante una consulta escrita del Comité de Asuntos Exteriores.