Sin explicaciones luego de la derrota
Decepción, sorpresa y dolor en la delegación española tras el fracaso de Madrid 2020
domingo 08 de septiembre de 2013, 00:28h
Si a algún despistado se le hubiera ocurrido pasar por el
cuarto piso del Hotel NH, y presenciar la rueda de prensa de la delegación
española, no hubiese estado muy desacertado si pensaba que se estaba
despidiendo a un ser querido. Las caras y gestos lo decían todo, las lágrimas,
eran un lugar común, y hasta el mismo Alejandro Blanco se "quebró" una vez
finalizado su discurso, y entre dos deportistas trataba de esconder su llanto.
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Eduardo Fleming
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Eduardo Fleming
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Eduardo Fleming
En el Hotel todo es sorpresa y dolor. Nadie comprende el
porque de la eliminación en la primera votación, logrando tan solo 26 apoyos de
los miembros del COI, y ante el sorpresivo empate con Estambul, caer también
derrotada por 49 a 45 votos.
En off the record algunos osan hablar de una "mano negra",
aunque la gran mayoría están tan abatidos que ni siquiera han tenido tiempo de
plantearse un boicot.
Los responsables de la delegación han puesto la cara en
orden de importancia. En primer lugar fue el presidente Mariano Rajoy, que tras
un anuncio que no iba a responder preguntas, el mismo se prestó ante la prensa
a los interrogantes.
Rajoy se mostró firme en su discurso inicial, y tratando de
hacer un paralelismo con el deporte afirmó que "no se gana siempre" -aunque
olvidó recordar que esta es la tercera vez que Madrid cae en su intento- y
reafirmó el apoyo del gobierno "con mucha más intensidad al deporte".
El presidente negó que esta derrota vaya a tener
"consecuencias políticas" y remarcó que el ánimo del país no va "a caer en
absoluto" tras esta derrota, ya que resaltó que "somos capaces de pelear por
nuevos objetivos".
Luego fue el turno del Príncipe Felipe, que se llevó todos
los elogios, tanto de la presentación en el Hilton como de su solvencia en la
conferencia de prensa. Lo primero que contó fue la charla que mantuvo con su
Padre, el Rey Juan Carlos, quienes compartieron la ilusión inicial y la tristeza tras el
desenlace, al tiempo que le pidieron que enviara un mensaje de apoyo a los
miembros de la candidatura.
Felipe destacó que "Un proyecto de esta envergadura ha
movilizado y unido a los españoles, es una herencia que tenemos que mantener
fuerte".
El Príncipe elogió el "magnífico trabajo" realizado "por el
equipo liderado por el presidente del COE, con todos los que le han
acompañado".
Igual que al presidente Rajoy, Felipe fue consultado sobre
como puede llegar a influir en el ánimo de los españoles esta derrota, y
sacando un optimismo increíble, respondió que "Como en el deporte, esto
solo nos puede dar ánimo para levantarnos de nuevo y continuar el camino".
En esa misma línea agregó que " como en el deporte
sabemos muy bien, esto sólo nos puede dar ánimo para levantarnos de nuevo, seguir
caminando, seguir compitiendo, seguir promocionando el deporte y seguir estando
orgullosos de nuestros deportistas".
Por si quedaba alguna duda Felipe confirmó que "Cualquier
proyecto de gran envergadura que se plantea desde España, por nuestra parte
siempre estaremos apoyándolo".
Tras las palabras de Felipe, la acción se trasladó rápidamente
del sexto piso al cuarto del Hotel NH, donde Alejandro Blanco junto a Ana
Botella expusieron frente a la prensa rodeados de los deportistas
multicampeones que viajaron a Buenos Aires para apoyar el proyecto.
Blanco, que fue quien le puso el pecho a la candidatura,
estaba realmente abatido, como si hubiese recibido un contundente knockout,
pero pese a eso tuvo la fortaleza para agradecer a todos por el acompañamiento recibido
y sorprendido como el resto de la delegación expresó que «No sé que ha pasado
en la votación"
El presidente del Comité Olímpico Español no ahorró palabras
de elogios para el Príncipe Felipe, quien "trabajó como uno más, liderando el proyecto,
enfrentándose a las preguntas y animándonos a todos, demostrando su calidad como deportista y como
persona".
Con las últimas fuerzas que le quedaban, Blanco emocionó a
todos cuando opinó que "Si todos entendemos lo que significa España, si todos
trabajamos juntos tenemos una gran nación para el futuro y esto significa nos
daremos cuenta de que podemos perder pero jamás seremos vencidos".
Con una ovación de fondo, que ya parecía más un acto
político que una rueda de prensa, donde a muchos periodistas también se le
veían las mismas lágrimas en los ojos de las que mostraba Blanco, tomó la
palabra la alcaldesa de Madrid Ana
Botella, quien como sus antecesores agradeció a todos por el respaldo recibido -incluyendo
a la oposición- y mandó un saludo especial a todos los madrileños que se habían
reunido en la Puerta de Alcalá para festejar, con quienes compartía "su
tristeza".
La alcaldesa aprovechó la ocasión para resaltar que se llegó
a ser ciudad candidata de unos juegos olímpicos, por " la enorme
transformación de los últimos años y sigue siendo una ciudad que tienen
muchísimos retos que afrontar".
Botella no se olvidó
de los deportistas de quienes dijo que " siguen siendo igual de buenos hoy
que hace dos horas", y felicitó "al deporte español, que está en su
mejor momento y solo nos alegrías".