Aseguran que las pasarelas del Parque Iguazú no están dañadas
sábado 29 de junio de 2013, 14:44h
Preocupa la crecida del agua
El gerente de operaciones del Parque Nacional Iguazú, el
ingeniero Marcelo Zuliani, afirmó a la prensa que "las pasarelas del Parque
Nacional Iguazú no están rotas, se desplazaron de su posición original para
permitir que el flujo de agua pase libremente y no comprometa las estructuras
de hormigón".
El encuentro con la prensa se produjo ayer a la tarde ante
la información que circuló entre los medios sobre la rotura de las pasarelas
del circuito superior que lleva a los saltos de la Garganta del Diablo.
Zuliani aclaró que no están rotas sino que se aplicaron los
procedimientos de rebatimiento de pasarelas del circuito Garganta del Diablo
debido al incremento del caudal del río Iguazú.
"Este mecanismo -agregó- se activa para que no se dañe la
estructura, que funciona de acuerdo a los distintos niveles del río".
Y agregó que cuando las aguas están bajas, "las barandas de
las pasarelas están levantadas y permiten la circulación de la gente hasta la
Garganta del Diablo. Pero cuando sube, se rebaten para permitir que el flujo de
agua pase libremente, reduciendo la resistencia y permitiendo -de ese modo- que
algún tronco en flotación pase por encima".
El mecanismo de las pasarelas "permite su desprendimiento
cuando el nivel del río es muy alto, como ocurrió en algunos tramos, para no
comprometer la estructura de hormigón", agregó.
Luego de recordar que el Parque Nacional Iguazú "no cerró en
ningún momento" y que el paseo sobre la Garganta del Diablo se encuentra
momentáneamente cerrado por seguridad, ratificó que "el resto de los atractivos
del Parque están habilitados y funcionan con normalidad".
De hecho, concluyó, en el día de ayer (viernes), ingresaron
al Parque 2.600 personas que tuvieron oportunidad de ver "unas cataratas
imponentes".