El diputado del Frente Peronista Sergio Pansa le arrojó un botellazo a Agustín Rossi
jueves 25 de abril de 2013, 16:23h
Uno estaba acostumbrado a ver escenas de ese tipo en la
tele, especialmente imágenes llegadas de Japón o algún que otro país pequeño y
nunca soñaba que un bochorno de esta naturaleza llegara al Congreso Nacional.
Pero el diputado del Frente Peronista Sergio Pansa no quiso
quedarse afuera de estos papelones y decidió
arrojojarle esta madrugada un botellazo al jefe de la bancada del Frente
para la Victoria (FpV) en medio del escándalo que se desató por la votación del
artículo 2 del proyecto del Consejo de la Magistratura.
El legislador del Movimiento Evita, Leonardo Grosso, aseguró
que el diputado Pansa "es un cobarde, canalla y agresivo" por la
agresión a Rossi, a quien le tiró una botella de plástico, cuando se desató el
escandalo por la votación del artículo 2.
Lo que sucedió fue que la oposición comenzó a festejar lo
que consideró una victoria y cuando el presidente de la Cámara Julián Domínguez
informó que había dos votos sin identificar, los legisladores estallaron en
cólera y empezaron a los gritos.
En este contexto, Pansa arrojó la botella de plástico que
los periodistas no habían podido identificar en un primer momento, pero luego
Grosso aclaró que fue el diputado puntano del peronismo opositor quien
protagonizó ese conato de agresión.
"Fue la culminación de la agresión verbal que sufrimos
desde que comenzó la sesión ayer a las 12. La oposición una vez más demostró su
poca tolerancia democrática, pero por suerte este proyecto político tiene un
rumbo claro y sigue avanzando en la democratización de la Argentina",
afirmó Grosso.
Agregó que "primero no quisieron dar quorum, lo
logramos; luego ingresaron al recinto a agredir violentamente desde lo
discursivo, después abandonaron la sesión e igualmente continuamos sin ellos y
logramos aprobar por amplia mayoría tres leyes clave para democratizar la
Justicia".
La agresión de Pansa se produjo en momentos en que Rossi
mantenía una discusión con los radicales Miguel Ángel Basse y Ulises Forte,
quien parado desde su banca, acusaba al diputado oficialista santafesino de
"haber cometido fraude", lo que enfureció al jefe de la bancada del
FpV, que debió ser contenido por sus pares.
De todos modos no fue el único episodio que sucedió, ya que
en forma simultanea la diputada del peronismo opositor Graciela Camaño,
acompañada por Patricia Bullrich, intentaban sacarle el micrófono al presidente
de la Cámara Julián Domínguez, para que no pueda hablar a los legisladores a
los cuales les informaba la situación que se planteaba con este artículo.
Grosso señaló que "la oposición hace política de la
derrota, porque esa, lamentablemente, es su única política".
Y agregó: "Vale destacar el compromiso democrático de
algunos, muy pocos como Elisa Carrió y Patricia Bullrich, diputados que se
quedaron a debatir cuando la mayoría de los legisladores opositores ya se había
ido a su casa".
"A pesar de la desastrosa oposición, que fue con
intenciones de abandonar la sesión antes de que comenzara, logramos aprobar las
leyes", resaltó Grosso