Las nuevas denuncias fueron formalizadas por José Villalba, presidente del Fondo Intergubernamental para la Descentralización (FIDES), que la semana pasada presentó otras cinco contra el gobernador del Zulia y candidato a la alcaldía de Maracaibo, capital de ese estado del noroeste del país, en las elecciones municipales y regionales del próximo 23 de noviembre.
"Lo que hemos encontrado en el Zulia es inaudito, algo que no se repite en ningún otro estado del país", dijo Villalba a los periodistas, a quienes enumeró obras públicas con supuesto sobreprecio y otras simplemente no ejecutadas, por un total de 18,6 millones de dólares transferidos a ese estado por el Gobierno.
Una que vez que fueron formalizadas las primeras denuncias en su contra, por el FIDES y la unicameral Asamblea Nacional, controlada por diputados afines a Chávez, por supuesto enriquecimiento ilícito, presuntos sobornos a periodistas y donaciones irregulares de bienes de la Gobernación del Zulia, Rosales dijo que tendrán que matarlo para sacarlo de la contienda política y electoral o encarcelarlo.
"Tendrán que matarme, porque no tienen ninguna razón para hacer nada contra mí", dijo y aseguró que todos los señalamientos en su contra obedecen a un plan "político, sucio y cobarde" por el hecho de figurar en las encuestas como favorito para ser alcalde de Maracaibo.
"Tengo una ventaja que ronda los 45 puntos para ganar" y eso se debe esta "guerra" de denuncias basadas en "mentiras y falsedades", ha reiterado el líder opositor.
Chávez, quien ha pedido que las instituciones actúen contra el gobernador conforme a las denuncias, también ha acusado a Rosales de narcotráfico y de un complot para matarlo, por el cual dijo que desistió de asistir a la Cumbre Iberoamericana celebrada el mes pasado en El Salvador.
Gane o pierda la elección, "Rosales va preso", ha reiterado el jefe de Estado.