El gobierno fue terminante con el futuro que quiere la oposición para Aerolíneas

El ministro de Planificación, Julio De Vido, rechazó el proyecto de la oposición que pide la quiebra de Aerolíneas Argentinas (AA), negó que el Gobierno esté dispuesto a pagar "cualquier cosa" por la empresa y destacó el rol de controlador de la operación que el proyecto del Ejecutivo le otorga al Congreso Nacional.

"No vamos a negociar de rodillas, vamos a negociar de pie", subrayó el funcionario en referencia a la negociación con el grupo Marsans por AA y Austral, durante su visita a las obras de la central Atucha II en la localidad bonaerense de Lima.

"Hay que leer con todos los sentidos el proyecto de ley que mandó la Presidenta" al Parlamento, remarcó el ministro, y agregó que "en ningún momento planteamos pagar cualquier cosa por Aerolíneas Argentinas, ni escapar de todos los organismos de control, incluido el Congreso".

En ese sentido, De Vido recordó la exposición en Diputados del secretario de Transporte, Ricardo Jaime.

"Bajo ningún aspecto estamos de acuerdo en seguir los consejos o las ideas de aquellos que cuando tuvieron oportunidad de defenderla la entregaron, como el gobierno de la Alianza que vendió Aerolíneas por un dólar al gobierno español", enfatizó.

De Vido insistió en destacar el rol que le da al Congreso la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, y recordó que el proyecto de ley enviado al Parlamento "es la ratificación del acuerdo que firmamos con Marsans, en el cual el Congreso quedó habilitado para chequear el estado contable final" de la empresa. 

"Resulta sorprendente que los que entregaron Aerolíneas,  empezando por Austral en la década del 80, después quisieron entregar Aerolíneas a Scandinavian pero no pudieron y si podían lo hubieran hecho son ningún paso por el Congreso", sostuvo.

Luego señaló que "algunos que participaron activamente en la entrega en la época del menemismo, ahora quieren volver a entregarla pidiendo su quiebra", en alusión al proyecto de ley impulsado por el senador radical Gerardo Morales, como alternativa a la iniciativa del Ejecutivo.

Jaime informó sobre la resignación de partidas
El secretario de Transporte, Ricardo Jaime, manifestó hoy su desacuerdo con el proyecto de quiebra de Aerolíneas presentado por la oposición y aseguró que se reasignaron partidas presupuestarias con destino a esta empresa que "no estaban en ejecución".

El funcionario dijo además que la deuda de la empresa no asciende a 800 o 900 millones de dólares, sino que la exigible es de 186 millones de dólares, de la que se deben descontar 50 millones que son una deuda con el Estado.
En diálogo con Radio Mitre, Jaime explicó que la reasignación de partidas presupuestarias con destino a Aerolíneas fue porque los mencionados fondos no se estaban ejecutando.
"Mientras se debate en el Congreso la compra por parte del Estado Nacional de ambas empresas -Aerolíneas y Austral-, lo que queremos es que la gente vuelva a volar", dijo Jaime.

Aclaró también que se dará discusión al proyecto alternativo que presentó ayer la oposición.

"Ayer ví el proyecto y la presentación. Faltaba (Fernando) de la Rúa y era la Alianza que en el 2001 hizo explotar al país. Me dejó bastante preocupado", reflexionó.

 Dijo que su preocupación se basa en que la propuesta opositora pretende crear una empresa nueva y quebrar a Aerolíneas y Austral. "Crear una empresa nueva de un día para otro, en poco tiempo, no se puede", expresó.

"Armar una empresa nueva, con aviones nuevos, lleva de uno a dos años como mínimo. Nosotros para conseguir un sólo avión estuvimos una semana negociando con los leasing. Conseguimos un sólo avión, un MD que está en Ucrania y que tardará 40 días para llegar al país", ejemplificó.

Respecto de las críticas a que el Estado pudiera quedarse con una deuda cercana a los 800 millones de dólares, dijo que esa deuda existiría sólo en el caso de que las dos empresas fueran a quiebra.

"La deuda hoy en dólares de ambas empresas exigible, que uno puede renegociar es de 186 millones de dólares, de los cuales hay que descontar 50 millones de dólares que es con el Estado nacional. De esa deuda ya se está hablando con los proveedores que son los mismos que alquilan aviones, que tienen todo el servicio de Amadeus (de reservas) en el mundo", expresó.

Consultado sobre el por qué se tendría que pagar una deuda de una empresa que no ha cumplido con lo pactado, contestó: "Nosotros tampoco queremos pagar la deuda. Lo que queremos es que las dos empresas sigan volando, por eso le aplicamos un método para saber cuál es el valor de la empresa y saber realmente quién tiene que pagar a quién. Antes que se resuelva esto ya están diciendo que hay que mandarla a la quiebra", expresó.

"A partir de que la manden a la quiebra y que se ponga una nueva empresa, ¿en qué va a viajar la gente?", se preguntó.

Luego se le consultó si para que las líneas aéreas sigan funcionando se van a desafectar fondos asignados a viviendas, respondió: "No. Lo que se hace es reasignación de partidas para ir siguiendo en toda la parte operativa".

"Son partidas que se reasignan. Los planes (de vivienda) que se están desarrollando se están cumpliendo cabalmente con todos los programas que tiene que ver con la asistencia", explicó.

Jaime dijo que las partidas aludidas "no se están utilizando. Como no se utilizan, las reasignamos. Uno proyecta la ejecución de determinadas partidas y que en función de la cantidad de obras que estamos realizando se pueden reasignar", reflexionó.

"Fíjese la cantidad de viviendas que estamos inaugurando. Estamos cumpliendo con los programas de financiamiento de todos los planes habitacionales y de otros planes", expresó.

Consultado sobre quién paga los sueldos de las empresas aéreas, dijo que "a partir del 8 de julio pasado, lo está pagando el Estado nacional. Hicimos esto para que no se paralizara la empresa y se generara un caos total en la Argentina"