¿Estamos locos o qué? Ahora festival erótico en Madrid (con el calor que hace)

Dicen (ellos) que los gustos de la población de un país pueden perfectamente definir el estado cultural, económico, social y, hasta incluso, espiritual de una sociedad. Manda narices. Si esto es cierto, así de repente me viene a la cabeza que en España el periódico que más se vende es el Marca y la revista con mayor tirada es Pronto. Pues, entonces, estamos aviados. No quiero yo menospreciar al fútbol ni a las revistas del corazón, pero, claro, teniendo en cuenta las teorías de los sociólogos….

Todo esto lo digo por lo siguiente: el cine porno es una industria muy potente y en alza. Ya les gustaría a la plataforma de los actores (adalides de la cultura así en bloque), tener la caja que tienen los que se dedican a filmar a señoritas y señores haciendo las cosas que el resto de la humanidad hace en privado. Lo bueno que tienen las cifras es que no mienten y no están sujetas a interpretaciones. En España actualmente se ruedan 180 películas porno al año, aparecen (en DVD) 1000 títulos nuevos anualmente sumando una facturación de 470 millones de euros. Igualito que el cine español y sin dar la brasa, que es lo mejor. ¿Quién ve este cine? Pues mucha gente. Es evidente. No nos llevemos las manos a la cabeza. Hay un sector de la población muy alto que consume esta industria y, económicamente hablando, nos beneficia a todos; genera empleo y activa desde su sector la economía.

Desde el día 26 de este mes y hasta el 28 se celebra en Madrid el FICEB que es el festival de cine erótico de Barcelona. Aunque, ateniéndonos a las siglas, debería llamarse FICEM. Será en la sala multiusos Fabrik de Madrid y durante tres días harán de todo: entregar premios, hacer homenajes…en fin y más cosas que no se pueden desvelar en una página web decente como esta. A todo esto con el calor que está haciendo estos días en Madrid.

Esta mañana se ha celebrado la rueda de prensa de presentación en Loft, 39, en Madrid. Era muy fácil reconocer a los actores y actrices porno. En ellas, por la escasez de su ropa, en ellos por los abultados músculos. De todas las cosas que más me llamaron la atención son los zapatos que llevan ellas. Unas plataformas imposibles que (imagino) deben de ser incomodísimas para caminar, para otros menesteres ni idea. En cualquier caso, si las llevan será porque a los consumidores de este cine (imagino que en su mayoría masculino) les gustan. Habrá que consultar con los libros de Freud el por qué de tamaño fetichismo. Porque, y estarán de acuerdo conmigo las chicas que me lean, los zapatos de tacón estilizan, pero las plataformas!!!!!!!!!!!!!