Bachelet condena brutal asesinato de dos menores

La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, expresó su "dolor e indignación" por el asesinato de dos niñas ocurrido en la sureña ciudad de Valdivia y anunció que el Gobierno se sumará a las acciones legales contra los culpables.

"Lo primero que quiero es hacer llegar a sus familias nuestras condolencias, por saber el dolor y la impotencia que se sufre ante una situación como esta", manifestó Bachelet a los periodistas durante una visita a la sureña región del Maule.

"Por eso es que también, como Gobierno, vamos a sumarnos a las acciones judiciales que correspondan, porque nos parece que un hecho tan grave, tan dramático, un crimen de esta naturaleza no puede quedar impune", agregó.

Las niñas Sofía Sarabia, de 6 años, y su amiga Camila Godoy, de 7 años, desaparecieron la noche del miércoles después de que una de las menores avisara a sus padres que un hombre había ofrecido regalarles un perro, según dijeron entonces los familiares.

Esa noche, los parientes y vecinos del sector de Isla Teja, de Valdivia, a 835 kilómetros de Santiago, buscaron a las pequeñas sin resultados.

El jueves, la policía encontró una prenda de ropa manchada de sangre, pista que condujo a una vivienda situada a unas seis manzanas de los domicilios de las niñas, que eran vecinas, y en cuyo garaje estaban los cadáveres de ambas, envueltos en plástico.

Hasta el momento se desconoce si las niñas fueron violadas antes de ser asesinadas, aunque los primeros exámenes señalaron que la muerte fue causada por asfixia.

El único y principal sospechoso del crimen es el habitante de la vivienda, identificado como Andrés Muñoz Soto, un individuo con prontuario con drogas y violencia familiar, quien está acusado por el presunto asesinato de las dos niñas.

Muñoz, según fuentes judiciales, no ha confesado la autoría del crimen, pues se ha acogido al derecho de guardar silencio, aunque hay múltiples pruebas que lo inculpan.