La Liga se viste (más) de blanco

Más blanca, (casi) imposible. La Liga. Porque salvo (impensable e inhabitual) hecatombe del Madrid, los de Schuster, por méritos propios y deméritos ajenos -léase Barça, Villarreal y Atlético sus (teóricos) perseguidores- llevan camino semana a semana de quitarle  la poca emoción que le quedaba. Excepto los blancos, petardean y no ganan ninguno de los seis primeros. Al menos, para que la competición siga teniendo interés, sí lo hacen los colistas Depor y Levante, éste ya casi hundido, sorprende lográndolo por primera vez en la temporada fuera de casa imponiéndose al Murcia y destrozando miles de quinielas. Claro que para petardo petardo el de sus vecinos y eternos rivales del Valencia,  que han adelantado la traca fallera.

Porque el equipo que dirige un Koeman cuestionadísimo por el nulo juego y resultados desde que llegó, se encuentra con el increíble objetivo de ¡salvarse del descenso! Ya que los 'che' están en puestos cada vez más cercanos de él. Más próximos a esos lugares malditos, cinco puntos, que de los que conducen a la AUEFA, seis, y a la Liga de Campeones, diez. Toda una ‘mascletá’ para el tercer presupuesto de Primera, sólo superado por los dos grandes/grandes, Madrid y Barça. No tanto fiasco pero casi, dada la enorme desventaja, ahora ya d enueve puntos, fue el de los azulgrana, que una vez más fallaron en uno de los fáciles desplazamientos, el de San Mamés, donde los leones, a falta de calidad suplieron con garra la diferencia de clase y dieron una imagen muy pobre de un conjunto como el de Rijkaard que aspira a la Liga. Y van…

Lo del Atlético tampoco debería ser normal, pues en un campo donde siempre había logrado algo positivo, el Son Moix mallorquín, suma su tercera derrota seguida, haciendo honor a esa gloriosa estrofa de su himno 'sabiniano' de "¡qué manera de palmar"¡ en sólo siete días, tras caer ante Madrid en Liga y Valencia en Copa. Pero ya se sabe que ‘El Pupas’ no es un club normal, y al menos se beneficia con el sorprendente petardo del Espanyol -quizás acusando la ausencia de su lesionado goleador Tamudo- en casa, y mantiene el cuarto lugar de la tabla. Como el Racing mantiene –además del título honorífico de equipo revelación- su sexto lugar pese a que no pasó del empate ante el ‘nuevo’ Zaragoza de Irureta.

En fin que la Liga, en cuanto a la lucha por el título, no quiere ponerse interesante y ser noticiosa para librarnos de la cada día más impresentable demagogia de socialistas y populares en su carrera hacia el campeonato electoral del 9-M. O mejor dicho/escrito, es el Madrid el que lo impide con su regularidad que le está llevando a batir récords de puntos, goles y diferencias desde hace lustros. A este paso, hasta es capaz el 9-M de cantar el alirón y, entonces sí, disputar el trono de la actualidad con el triunfador político del igualadísimo y emocionante partido electoral. Eso sí, tan emocionante como las cuatro eliminatorias coperas de cuartos de final que se disputan esta semana. Y es que en el torneo del KO sí que hay emoció, Por una razón muy sencilla: porque el Madrid, como es tradicional, se bajó en marcha y lo regaló a los demás.