Asimismo, recuerda que el terrorismo es "intrínsecamente perverso" y que "ninguna reivindicación política otorga legitimidad a nadie para amenazar y asesinar". Por el contrario, sostiene, "quienes así actúan se convierten en criminales a cuyas conductas ha de ser aplicada la ley con todo su justo rigor".
Por otra parte, señala que la Instrucción Pastoral de la Asamblea Plenaria, titulada 'Valoración moral del terrorismo en España, de sus causas y de sus consecuencias', del 22 de noviembre de 2002, conserva "plenamente su valor" y que éste "puede ser un momento adecuado para volver a leerla".
Por último, indica que los obispos han aconsejado "en diversas ocasiones" que se rece por la conversión de los terroristas y por el final de esta plaga lacerante de la convivencia. "Las comunidades cristianas, las familias y todos los fieles lo vienen haciendo con constancia y esperanza", señala la nota, al tiempo que recuerda a las víctimas del terrorismo y sus familiares que "tienen un lugar especial en la oración y en el apoyo de los católicos".
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