El acto, al que también acudió el teólogo brasileño Leonardo Boff --uno de los fundadores de la Teoría de la Liberación--, comenzó a las 13.00 horas con la alocución de Javier Baeza, uno de los párrocos de la esta iglesia.
Todo ello se organizó en el patio anexo a la parroquia donde se dieron cita vecinos y colectivos sociales, así como comunidades cristianas llegadas de Valencia, Zaragoza, Salamanca, las Islas Canarias, Barcelona, Santiago, Córdoba, Granada o Sevilla, quienes se sentaron en sillas o bien permanecieron de pie. Además, un coro de tres personas entonó algunas canciones como 'El himno de la alegría'. Posteriormente, los responsables de la asamblea de la parroquia organizaron, para las 14.30 horas, una comida.
El encuentro celebrado hoy completa el ciclo de tres actos que los organizadores habían previsto para el fin de semana en la parroquia bajo el lema 'Unidos en la exclusión. Encuentro en torno a San Carlos Borromeo'.
Los párrocos decidieron celebrar esta misa a pesar de que el pasado 31 de mayo tuvieran conocimiento de que el Arzobispado de Madrid, a través del Boletín Oficial de la Diócesis de abril, decidiera retirarles la labor de culto y traspasar estas instalaciones a Caritas Diocesana para que continuase su labor.
"NO NOS TENEMOS POR QUÉ IR"
Asimismo, Baeza aclaró que si la Iglesia les ayuda seguirán dentro de ella, pero si no lo hace, porque ha decidido que les "sitúa fuera", entonces, en opinión, son bien ellos los que les "echan", o bien "los que se marchan".
"No nos tenemos por qué ir, si alguien cree que sobramos en la Iglesia pues ya sabe donde tiene la puerta. El decreto del arzobispado de Madrid no habla de cierre sino de sanación canónica, curiosamente una cosa que se sana es porque está enferma, pero yo no lo creo", afirmó.
"La visita de Leonardo Boff confirmó, como él mismo dijo a los medios, que vino de peregrinación a un lugar sagrado, porque en torno a esta parroquia ha habido una gran marea de solidaridad con una población muy machacada durante estos últimos años", subrayó.
Por último, a las preguntas de los periodistas por la presencia de José Bono y de Pedro Zerolo en el día de hoy, Baeza reiteró que "a nadie se le ha pedido la partida de bautismo y cuando menos la adscripción política".
"EN LA IGLESIA SOMOS MUCHOS LOS QUE CABEMOS"
Bono, afirmó hoy que si Cristo estuviese hoy en la Tierra "estaría también con la gente más pobre" y con las personas que se reúnen cada domingo en la Parroquia de San Carlos Borromeo.
"Cristo, a los únicos que echó de la Iglesia, es a los que la convirtieron en una casa de comercio y de negocio. Aquí estaría a gusto, porque estaría con los suyos", manifestó al término de la Misa celebrada en esta Iglesia que el Arzobispado cedió a Caritas Diocesana y a la retiró la labor de culto por no atenerse a la ortodoxia católica.
"Yo voy muchos domingos a misa y hoy es otro domingo que he venido. Soy amigo de Enrique Castro (párroco de San Carlos) desde hace muchos años y es una muestra también de solidaridad y de fe porque no todo el mundo entiende la fe de la misma manera", explicó.
"En la Iglesia somos muchos los que cabemos, aunque a veces a los más ortodoxos les incomode que haya pecadores y gentes que no somos tan perfectos como ellos, pero tenemos que aguantarnos", manifestó.
Por su parte, Zerolo afirmó que quiso acudir a la misa "porque es la mesa solidaria, la mesa de los excluidos, la de aquellos que más sufren y luchan por los excluidos". "Siempre he estado, empecé aquí a trabajar y sigo conectado con Enrique de Castro, con los curas de barrio", reveló.
"Soy laico y ateo, pero mi cura es Enrique y mi iglesia es San Carlos Borromeo; otra iglesia también es posible. Estoy siempre al lado de los que sufren y que menos tienen", manifestó tras ser preguntado por qué había acudido a este encuentro.
Si (
No(
