Más allá del aburrimiento

Es un aburrimiento infinito este pandemonium de siglas, candidaturas e incertidumbres en torno a la presentación de la izquierda abertzale a las elecciones locales y forales del 27 de mayo. No creo que nada semejante haya ocurrido u ocurra en ningún otro país democrático del mundo. La gente de Arnaldo Otegi nos tiene mareados hasta la extenuación con sus quiero y no puedo. Y los dirigentes del PP ya han traspasado todas las barreras de lo cognoscible con sus alegatos irreales con base en sus manías político-demagógico-electorales siempre contra el Gobierno y su política antiterrorista. Con lo sencillo que habría sido para los primeros condenar la violencia y cumplir las leyes y para los segundos cumplir con su estricta obligación de apoyar la política del Gobierno en la materia. Entre unos y otros están soliviantando los ánimos de muchos españoles, cosa que se comprueba en cuanto se sale a la calle, se conecta alguna cadena de radio o se leen las cartas al director de cualquier periódico. A veces se da la impresión de que todo el mundo se ha dejado contagiar.

Lo digo por la irracionalidad que domina en el tratamiento del tema de ANV, un partido con más de setenta años, que condena explícitamente la violencia y que fue recompensado por el Gobierno del PP con 700.000 euros como reparación por el robo de su patrimonio por el franquismo. Lo digo por la falta de sensibilidad ante las evocaciones que trae el juicio contra el presunto asesino de Francisco Tomás y Valiente, como es aquella de las declaraciones de Aznar (en las vísperas de su llegada al poder en 1996), cuando echó la culpa al Gobierno de Felipe González de lo sucedido con el ex presidente del Constitucional. Y también lo digo por la mirada de tantos hacia otro lado en el día del 70º aniversario del genocidio de Gernika, la primera vez que se masacraba desde el aire a una población civil, de la mano de la legión Cóndor y del corazón de la sublevación franquista, como si el rechazo de la memoria histórica equivaliese a la bendición de una guerra y una dictadura ilegítimas y sanguinarias.