Campos, que manifestó sentirse
"satisfacho y orgulloso" con la actividad política que ha desarrollado durante 16 años en el Ayuntamiento, la Diputación y el Consell, se mostró convencido de que su decisión
"no implicará ningún perjuicio para los resultados electorales".
El dirigente popular, que ha esperado a hacer público su abandono de la política tras la firma del decreto de la disolución de les Corts y la convocatoria de elecciones, aseguró que "en la vida todo tiene un final, y, desde el punto de vista de la actividad política pública ha llegado el momento de mi retirada".
Al respecto, afirmó que es una decisión "adoptada desde hace varios meses, que la sabían quienes la tenían que saber, es decir, el presidente regional del PP, Francisco Camps, el presidente provincial, Carlos Fabra, y el alcalde de Castellón, Alberto Fabra". "Decisión -añadió- que sólo se debe a motivos personales y familiares y que no hay absolutamente nada detrás, ni nada que ocultar".
"Comprendo que algunos puedan no creer lo que digo y que hagan una interpretación distinta al respecto, lo que respeto, pero no existe ninguna otra motivación que me haya movido a tomar esta decisión", aclaró.
Campos afirmó "seguir comprometido con el proyecto político al que representa". Según dijo, "estamos en un buen momento electoral, en el que el PP, en la ciudad de Castellón, en la provincia y en la Comunitat Valenciana, tiene magníficas expectativas, y mi decisión no implicará perjuicio para los resultados electorales, por lo que creo que llega en el momento político adecuado".
En este sentido, explicó que ha intentado hacer las cosas bien, "unas han salido mejor y otras no tan bien, pero también he intentado no hacer daño personal a nadie, distinguiendo lo que es el debate político públido del aspecto personal de mis adversarios políticos, y creo que lo he conseguido".
Así, Campos, que encabezó la candidatura autonómica del PP por Castellón en las pasadas elecciones, descartó formar parte de ninguna de las listas electorales, incluidas las de las elecciones generales, "puesto que si tuviese interés en seguir en la política, continuaría aquí", dijo. No obstante, indicó que la lista autonómica "será potente y estará encabezada por una persona conocida y con experiencia".
Respecto a su futuro profesional, manifestó que todavía no sabe a qué se dedicará, "puesto que son decisiones que iré adoptando junto con mi familia". También manifestó quedarle "alguna espina clavada" a nivel personal durante los años en que se ha dedicado a la política, aunque prefirió no comentarla "puesto que no merece la pena".
Comentó que el "saldo" de la labor desempeñada en los últimos cuatro años "es positiva", puesto que "adquirí compromisos con los ciudadanos y la mayoría se han podido cumplir, sobre todo, los más importantes".
Preguntado por la reacción de Camps ante su decisión, señaló que "habría que preguntárselo a él, aunque creo que la comprende porque sabe que es personal, aunque, a lo mejor, le hubiese gustado que no la hubiese tomado". Respecto a su cargo como secretario general del PP en Castellón, matizó que "es una cuestión que tendremos que decidir, sobre todo Carlos Fabra, aunque, una vez que pasen las elecciones tiene que haber una lógica, y si uno no está, pues no está", apostilló.
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