Arranca la huelga de basuras pese a la oferta sorpresa de De la Torre de retirar el ERTE

La huelga en la empresa mixta de limpieza Limasa de Málaga se mantiene pese a la oferta sorpresa del alcalde, Francisco de la Torre, de retirar el Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), que se aplicará a partir del 1 de enero de 2014, si se aceptaba la última propuesta entregada al comité.

En el parque central de Los Ruices se daban cita antes de la medianoche los trabajadores para conocer el resultado de la reunión mantenida en el Ayuntamiento, que terminó con la intención del comité de empresa de convocar la huelga indefinida, pero que luego dio un pequeño vuelco.

De hecho, una parte de los trabajadores solicitó votar la última propuesta del alcalde de Málaga --"si los trabajadores de Limasa aceptan la oferta entregada y, por tanto, se firma, se retira el ERTE", decía 'in extremis' en Twitter--, una opción que, sin embargo, no ha sido posible, manteniendo la huelga. De hecho, ya han salido los primeros servicios mínimos, protegidos por la Policía.

En cuanto a la reunión con De la Torre, de dos horas y media de duración, el Ayuntamiento hizo una nueva propuesta, "muy positiva", según el alcalde, que también estaría, no obstante, por debajo de los seis millones de euros de ahorro --en torno a los 5,4 millones; la diferencia tendría que ser aportada por el Ayuntamiento-- y que, a su juicio, "hemos estado a punto de cerrar".

La propuesta pasa por un convenio para 2013 y 2014, con una paga de productividad de 368 euros brutos --frente a los 867 euros del presente año--, actualización de la antigüedad y congelación del resto de conceptos.

Se elimina el complemento de incapacidad temporal por enfermedad durante los primeros 15 días a partir de la tercera en el año natural; en caso de mayor duración, se complementaría al cien por ciento del salario bruto mensual.

En cuanto a la distribución de las vacaciones, se reparten en dos periodos: 15 días desde el 1 de mayo hasta el 31 de octubre, considerado como verano, y 21 --15 días de vacaciones y seis días de descansos acumulados-- desde el 1 de noviembre al 30 de abril, es decir, invierno. Un aspecto en el que no ha habido un apoyo unánime por parte del comité de empresa, pero que "no sería justificación para convocar una huelga", en palabras del alcalde.

En este punto, De la Torre ha precisado que en verano la plantilla trabajaría un sábado de cada cuatro --seis en total en el periodo comprendido desde el 1 de mayo al 31 de octubre--. No los descansaría, puesto que ese montante sería equivalente a los polémicos seis días naturales de vacaciones adicionales.

SOCIOS PRIVADOS

Sobre los socios privados, que tienen el 51 por ciento del accionariado --el Ayuntamiento, el 49 por ciento, aunque "cuenta con la capacidad de decidir"--, De la Torre ha incidido en que en 2012 renunciaron a su uno por ciento de beneficios. El objetivo es mantener ese "esfuerzo" en 2013 y 2014.

Sin embargo, el regidor del PP ha reconocido que "en la medida en que el esfuerzo solicitado a la plantilla sea menor, será más difícil conseguirlo". "Trato de animar, presionar y comprometer a los socios privados de ir en esa línea", ha expuesto.

Ante la disminución en la reducción del gasto de personal, ha afirmado que los privados le han planteado no renunciar a la totalidad de sus beneficios --600.000 euros--, sino a la mitad en 2013 y 2014. "Intentaré ir más lejos porque aquí solo ha habido la defensa del interés de la ciudad", ha declarado.

COMITÉ DE EMPRESA

Por su parte, el presidente del comité de empresa, Manuel Belmonte (UGT), se ha mostrado decepcionado y ha lamentado que "quieran abusar de los trabajadores", dirigiéndose rápidamente tras la reunión a las instalaciones de Los Ruices para preparar la huelga.

Aunque no ha dado más explicaciones, sí ha dicho, no obstante, que "hemos tocado todos los puntos, incluso nos hemos ofrecido a dejar la productividad en 368 euros, pero lo quieren quitar todo". "No lo vamos a permitir", ha apostillado.

Los servicios mínimos fijados por la Junta de Andalucía son de un 65 por ciento para el centro histórico y de un 40 por ciento para el resto de la ciudad, salvo hospitales, residencias de mayores, centros escolares y mercados.