La Liga sigue igual con la dictadura del 'Dúo Dinámico' futnolero

Fue Ortega y Gasset el que comentó tantas veces que para conocer bien España era necesario hacerlo con la situación de la Fiesta de los toros, que es verdad. Pero este paralelismo se mantiene incluso con mayor fuerza entre la denominada como Liga de las Estrellas y la vida real, y no sólo de nuestro país, sino en todo el orbe: mandan los ricos, sufren los pobres. Incluso con un matiz patrio, que no ocurre en ninguna de las otras grandes Ligas como Italia, Inglaterra y Alemania: la ya casi eterna dictadura del 'Dúo Dinámico' de los más potentes económicamente a años luz de los demás: Barça-Madrid, que se han repartido los últimos ocho títulos y llevan el inevitable camino de hacerlo también éste. Eso quita competitividad, emoción e interés a la competición y a la larga puede ser negativo incluso para los ingresos televisivos que son realmente los que mantienen el tinglado de la antigua y ahora moderna farsa competitiva.

¿Solucoón? Una muy sencilla, pero que estamos seguros no se aplicará aquí ni por la Federación del impresentable de Villar ni por la patronal de la Liga de Fútbol Profesional, tan conservadora en sus planteamientos. La solución pasaría por imitar,más o menos, a la NBA: tope máximo de presupuesto sin las enormes diferencias de por aquí, y elección de fichajes en orden inverso a la clasificación para potenciar a los débiles y rebajar el poderío de los grandes. Una utopía en España, vamos, O sea que no la veremos en los próximos cien o doscientos años, como mínimo.

En estas dos Ligas que se juegan aquí, la del título entre el dúo Madrid-Barça, y la otra con el resto de premios y castigos -puestos europeos y bajadas a los infiernos de la Segunda, respectivamente- ya vemos que cumplida prácticamente la mitad del calendario, el primero -o sea, el Superbarça- lleva ya la abismal diferencia de 14 puntos al tercero -el admirable 'submarino amarillo'- , y el segundo -el Madrid- once. Ambos solventaron sus compromisos de esta jornada a su manera: los de Guardiola con su bello lirismo de fútbol arte y 'jogo bonito' ante el Racing; los de Mourinho apelando a la lírica y el sufrimiento ante un Mallorca que le plantó cara y sólo cedió ante el gol del 'maldito' Benzema. Y así seguirán, salvo imprevisible cambio, 'per omnia saecula saeculorum'; o sea, hasta  su enfrentamiento directo en el Bernabéu.

En un segundo escalón, los semirricos Villarreal -al que le costó doblegar a la Real Sociedad en el encuentro que cerró la jornada dominguera- y Valencia, ya van muy descolgados. Pero se disputan los otros dos puestos europeos con el equipo revelación de cada año, ahora el Espanyol de otro míster de gran mérito, Pochettino. Fíjense si la Liga sigue igual, como la vida que cantaba el exportero madridista Julio Iglesias, que 'El Pupas' no se apea de tal catadura: sigue haciendo el ridículo en un año que puede ser nefasto: como no le interesaba la Liga Europa -antes Copa de la UEFA- decidió quedar eliminado muy pronto pese a ser el poseedor del título; como no le interesaba la Copa del Rey, ídem de ídem, y ahora parece que la Liga tampoco le interesa por sus continuos traspiés ante equipos de la zona baja: hace dos semanas el Hércules y este domingo ante los 'yogurines' del Sporting. Debe ser que quieren hacer honor a su 'sabinian' himno: qué manera de palmar.

Y, por último, en el pozo de la clasificación quiénes van a estar: los pobres.Como en la vida, sin necesidad siquiera de esa crisis mundial que han aprovechado los especuladores para provocarla y salir de ella más ricos, en definitiva, a costa de los pobres, ahora paupérrimos. Y ahí están los clubes de menor presupuesto y poder económico con el agua al cuello en su lucha por no descender, algo que tres de ellos -hoy serían Levante, Málaga y Almería, pero con Osasuna, Zaragoza, Sporting y Racing a una sóla victoria- no podrán evitar. De modo que en esta jornada de transición, la Liga siguió igual, justa de emociones. Pero éstas las tenemos a lo largo de la semana con el más emocionante, pasional y compulsivo de los Torneos, el del KO, el de la Copa con una semifinal de claro favoritismo, Barça-Almería, y otra -Madrid.Sevilla- en la que pueden saltar las chispas que la Liga no nos ofrece. Que así sea.