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La construcción respetará el Matadero y el depósito del Canal

El intercambiador de Legazpi tendrá 968 plazas de paking y 16 dársenas

Madrid cerrará el 'círculo virtuoso' de los intercambiadores de Madrid en 2011. Para esa fecha deberá ser una realidad el nuevo distribuidor de transportes de Legazpi, el último de los que se pondrá en marcha y gracias al cual Madrid será una de las pocas ciudades del mundo en contar con una de estas infraestructuras por cada autovía de acceso a la capital.

- Planos: así quedará el intercambiador en superficie y en planta


El proyecto fue presentado este martes por el consejero de Transportes e Infraestructuras, José Ignacio Echeverría, que puso de manifiesto -como se informó en el reciente reportaje sobre la extensión del Plan de Intercambiadores- que Madrid hoy "no podría moverse" sin este tipo de conexiones.

Echeverría anunció que la licitación del intercambiador de Legazpi se hará el próximo mes de junio y que los trabajos comenzarán en noviembre. La estructura contará con 55.000 metros cuadrados repartidos en dos niveles que albergarán 14 dársenas de autobús -climatizadas y accesibles- , 968 plazas de parking -540 para residentes y 428 rotarias- y una zona con comercios.

El presupuesto asciende a 54 millones de euros, gracias a los cuales se conectarán bajo tierra 26 líneas de autobús (las que salen de Legazpi y de la Plaza de la Beata María Ana de Jesús), las líneas 3 y 6 de Metro y se facilitará el trasbordo al Cercanías en las estaciones de Delicias y Méndez Álvaro, a sólo una parada. La demanda prevista es de 9 millones de pasajeros cada año.

Poner el Matadero "a toda potencia"
El nuevo intercambiador se situará en una zona muy importante para Madrid, ya que en el entorno de Legazpi, Delicias y el Paseo de la Chopera se encuentran el Matadero de Madrid, convertido en epicentro de la creación contemporánea, el Museo del Ferrocarril y parte del futuro Madrid Río, concretamente la 'playa de Arganzuela'. José Ignacio Echeverría recalcó por tanto que la infraestructura supondrá un servicio y una comodidad para los usuarios y un "impulso" para desarrollar "toda la potencia" de Matadero Madrid.

Por ello será especialmente importante que, como anunció, las obras del intercambiador respeten escrupulosamente las naves del centro y el depósito del Canal Isabel II situados junto a la plaza, que el consejero garantizó serán conservados.
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